Ver y ser vistos sigue siendo un aspecto clave tanto en conducción nocturna como cuando se circula de día. La marca DS convierte su firma lumínica en un elemento destacable en su última gran incorporación, el DS 7 Crossback. Más allá de procedimientos cara a la galería como la proyección de una luz púrpura que pivota 180º cuando se abren las puertas, el atractivo estético de las luces diurnas verticales asociadas a los intermitentes dinámicos y del peculiar esquema de las traseras basadas en la tecnología 3D Full LED, dispone de soluciones de iluminación muy prácticas y efectivas a la hora de circular.
La marca define una de estas soluciones como DS Night Vision. Basada en una cámara infrarroja situada en la parrilla delantera, detecta peatones y animales sobre la carretera hasta a 100 metros. La escena se visualiza en el cuadro de instrumentos digital, recuadrándose en amarillo o en rojo dependiendo de la cercanía al objeto.
La segunda toma el nombre de DS Active LED Vision y cuenta con cinco modos de iluminación -Parking, Town Beam, Country Beam, Motorway Beam y Adverse Weather. Estos se componen de un proyector principal de LED y de tres módulos LED rotativos. En función del ángulo del volante y de la velocidad del vehículo, estos últimos giran de izquierda a derecha o de derecha a izquierda, y pueden incluso inclinarse. El alcance de la iluminación se ve así aumentado o reducido. Por su parte, el haz es expandido u orientado mejor para iluminar más o menos los bordes de la carretera adaptando a cada situación de conducción.
