Cuando creíamos que en el plano tecnológico ya habíamos visto todo lo que Audi tenía en la recámara cuando conocimos el A8 en Barcelona, la marca alemana vuelve a sorprendernos con el nuevo A7 Sportback que estrena avances en iluminación y en su interior.
Hablar del diseño del A7 Sportback nos lleva a hablar irremediablemente de su sistema de iluminación. Hace años que Audi innova en este terreno, pero con este modelo el derroche de ingenio y tecnología es mayúsculo. Precisamente por esta razón, al margen del frontal con esa parrilla ‘single frame’ aún más baja y ancha que en el A8 y de su silueta con una línea de techo muy pronunciada, lo más característico del nuevo A7 Sportback son los grupos ópticos posteriores compuestos por trece segmentos verticales.
Al cerrarse o abrirse las puertas estas luces realizan una secuencia que lo hace único entre los vehículos de su género, demostrando que la sofisticación se conquista en cada detalle. Yéndonos a las ópticas delanteras, son hipnóticas funciones tan comunes la apertura o el cierre remoto de las puertas al hacer uso de doce segmentos de leds. Les recomendamos que vean el video que acompaña este reportaje. A propósito de los faros delanteros, la versión más equipada dispone de los faros HD Matrix led con luz láser.
Con él, Audi vuelve a inspirarse, como con el A8, en el prototipo Prologue, algo que salta a la vista en sus líneas tensas y una deportividad muy ‘Gran Turismo’ materializada en gran medida por esa línea de techo dinámica y unas proporciones propias de un gran coupé: 4,96 metros de largo, 1,9 de ancho y apenas 1,42 de alto. Es también un rasgo propio del A7 Sportback su zaga que al estrecharse gradualmente recuerda al de un barco. Su amplio portón está rematado mediante un alerón que emerge de manera automática al alcanzar los 120 km/h.
Interior muy avanzado
El futuro en forma de tecnología también se cuela en el interior del nuevo A7 Sportback. Hay mucho del A8 en él, pero desde un prisma más GT y, de nuevo, deportivo. Sacando punta a las posibilidades de la estética ‘black panel’, la gran pantalla superior de 25,7 cm (que visualmente es casi imperceptible cuando no está activa) se enmarca dentro de contorno de aluminio que también abraza el salpicadero.
Esa pantalla superior integra las funciones de información y entretenimiento. La inferior, de 21,8 cm, reúne los controles de los sistemas de climatización y confort, así como la entrada de texto mientras el conductor apoya su mano derecha sobre el ancho y ergonómico selector del cambio automático. Estas dos pantallas eliminan numerosos botones y controles, entre ellos, el clásico pulsador giratorio de Audi. 
Su manejo es idéntico al de una Tablet o un teléfono inteligente, ya que los usuarios sienten y escuchan un click de confirmación al activar una función. El control por voz es capaz de procesar órdenes que ya tiene almacenadas, pero también otras a las que accede mediante la nube y que ha sido aprendido por el sistema. También se conectan a la nube algunos servicios en línea de Audi connect como la información de zonas de peligro. El sistema de infoentretenimiento del nuevo A7 es el mismo que el del A8 y permite personalizar un total de 400 parámetros.
Completando ese entorno digital, según versiones, el A7 también cuenta con la instrumentación virtual sobre una pantalla de 31,2 cm y una instrumentación head-up display. El equipo de audio puede ser 3D también para los pasajeros de las plazas traseras al escoger el Advanced Sound Sistem de Bang & Olufsen. 
La genética en común con el A8 también permite al nuevo A7 Sportback acceder a un total de 39 asistentes a la conducción recogidos en lo que la marca alemana llama Audi AI. En 2018 abarcará también sistemas autónomos para entrar o salir de una plaza de aparcamiento incluso con el conductor fuera del coche siempre y cuando haga uso de la aplicación myAudi en su teléfono móvil.
Chasis electrónico
En marcha, el dinamismo que se espera de un GT Premium se logra mediante una dirección progresiva de serie, las cuatro ruedas directrices opcionales y una suspensión neumática revisada que, según la marca, hacen al A7 más vivo en carreteras viradas y más confortable en autopista. Son también opcionales la suspensión deportiva y la amortiguación controlada electrónicamente, que junto al diferencial deportivo y la dirección dinámica a las cuatro ruedas están recogidos e interconectados en la plataforma de chasis electrónico.
Este modelo se lanza al mercado con un motor 3.0 V6 TFSI turbo con 340 CV y 500 Nm con el que acelera de 0 a 100 en 5,3 segundos. La caja de cambios S tronic, la tracción quattro con tecnología ultra, el start-stop y, sobre todo, el estreno de la tecnología MHEV que apoya al propulsor térmico en marcha por inercia y que recupera energía durante la frenada hacen posible que su consumo medio.
