No hay invierno en que no surja el rumor permanente de que José Mari Ponce se va a traer un buen coche para volver a pelear por la victoria. Desde que el ex campeón de España confesara su pasión por el Porsche, los que murmuran han encontrado un filón, pero en el horizonte no hay otro coche que el BMW M3. Al menos de por ahora…
“Por mis mecánicos, que están en el mundillo, sé de esas habladurías”, ha reconocido José Mari, que de nuevo se presenta como candidato a la alcaldía de Arucas, puesto que ocupó desde junio de 2007 y hasta septiembre de 2009. Lejos de molestarse por ese interminable runrún, Ponce considera “un enorme orgullo” que tantos aficionados estén pendientes de él, pero admite resignado que mientras siga volcado con la política, su carrera deportiva seguirá en paréntesis.
“Condiciona mucho el hecho de seguir tan vinculado a la política y genera ciertos problemas el hecho de tocar la puerta de un patrocinador, así que desde hace años mis temporadas son muy previsibles. Pocas sorpresas puedo dar ya”. ¿Pocas? Alguna queda en la recámara porque Ponce, que sigue sin ver su retirada cercana a pesar de ir lanzado a por los 56 años, no se ve retirándose con el M3. “Por lo menos no antes de volver a subirme a un coche con el que pueda volver a ganar rallys. El año pasado hubo sólo un intento de conducir el Porsche de Fernando Capdevila, pero fue imposible porque el piloto que iba a subirse a él esta temporada quiso estrenarlo en Maspalomas”, recuerda el ex campeón de España de rallys.
Con 38 años de expediente deportivo, José Mari Ponce vuelve a la carga una temporada más con la idea de hacer el Campeonato Provincial de Rallys de Las Palmas y con la opción de poder correr en Tenerife o en La Palma. “Me encantaría poder participar en cualquiera de estas dos islas, pero llevo algunos años intentándolo y al final mis compromisos me lo impiden”, reconoce. Estará en el Rally Santa Brígida como uno de los aspirantes al podio y también será un fijo en el Islas Canarias ‘El Corte Inglés’.
