Ligeras variaciones caracterizan al nuevo Cabrio de Mini con respecto a la anterior versión. Se acentúa su alargada silueta mientras presenta un mayor aplomo tanto en la parte delantera como en la trasera, con una imagen semejante a un biplaza a la que contribuye su carrocería de dos puertas. La capo
ta de material textil y accionamiento electrohidráulico tiene la posibilidad de abrirse o cerrarse siempre que no se superen los 30 Km/h. Una característica que se suma a la función de techo corredizo y que permite disfrutar de sus especiales cualidades, siempre, a cielo descubierto.
Pero cuando hablamos de Mini, tenemos que tener en cuenta toda otra serie de equipamientos y elementos únicos atribuibles a este vehículo. Nos referimos a aspectos como la seguridad, donde una nueva barra antivuelco, oculta tras el asiento anterior, solventa con creces este apartado y su especial condición como descapotable. Como apunte decir que su particular configuración permite una total visibilidad ya sea a través del espejo retrovisor o volviendo la cabeza, activándose cuando el vehículo amenaza con volcar.
Frenos con sistema antibloqueo, regulación electrónica de la distribución de la fuerza de frenado, sistema de asistencia de frenado en curvas o el control dinámico de la estabilidad, entre otros dispositivos electrónicos de seguridad, completan el cuadro de prestaciones en este apartado. Un equipamiento digno de un vehículo que ofrece enormes posibilidades de entretenimiento en un marco único derivado de su tamaño y sus especiales cualidades dinámicas.
Para hacer valer tales condiciones el nuevo Mini Cabrio cuenta con una nueva generación de motores de gasolina de cuatro cilindros con turbocompresor Twin-Scroll o con sistema de regulación plenamente variable de las válvulas. Mil seiscientos centímetros cúbicos en versiones de 120 y 175 caballos de pura adrenalina para el Cooper Cabrio y Cooper S Cabrio. Aún así, sus cifras no riñen en absoluto con los principios de optimización en consumo y emisiones que permiten disfrutar de forma plena de las sensaciones, que sólo un Mini es capaz de ofrecer.
