“Bienvenidos al mundo 500, bienvenidos al mundo C”. Con esta frase inició Alfonso Ortín, Director de Comunicación de Fiat España, la presentación en Canarias del nuevo Fiat 500C. El escenario utilizado en esta ocasión ha sido la isla de Lanzarote en deferencia a sus recientes socios como concesionario Fiat en esta isla, el Grupo Cabrera Medina, a través de su nueva corporación Came Canarias. Y es que el clima de la isla conejera, especialmente beligerante en estos días con sus visita
ntes, invitaba a poder disfrutar de las posibilidades del “CONVERTIBLE” que no cabriolet, del exitoso Fiat 500, ataviado para la ocasión, con una serie de guiños a sus múltiples posibilidades de personalización.
Para entender el concepto de esta nueva versión es imprescindible echar la vista atrás y remontarnos a los tiempos en el que el “cinquino” se convertía en un auténtico fenómeno de masas. Corría la década de los 60 y el vehículo familiar por aquel entonces, el único que atendía las necesidades de todos sus componentes, debía aunar una serie de conceptos que permitieran, no sólo su utilización en cualquier circunstancia sino también en cualquier época del año. Y es precisamente la interpretación de este concepto la que se traslada en el nuevo 500C hasta nuestros días.
En realidad se podría decir que el nuevo convertible aúna tres vehículos en uno, manteniendo en todo momento las características de seguridad, espacio y diseño, desplegadas en la versión original. Más de 500.000 unidades vendidas en todo el mundo avalan su trayectoria desde su reciente lanzamiento, de las cuales 190.000 corresponden al pasado ejercicio. El mejor ejemplo para valorar el nuevo potencial que ofrece el 500C es que su cifra de pedidos se ha disparado hasta alcanzar el 40% de la demanda total.
El Fiat 500C se ofrece en dos versiones de acabado (Pop y Lounge) y cuatro motorizaciones, dos en gasolina y dos diesel, en la que destaca el propulsor 1.3 Multijet 16V de 95 CV de segunda generación y al que se asocia, de serie, el sistema Start&Stop, también disponible en opción en los modelos con motor de gasolina. La conjunción de este dispositivo y la caja de cambios robotizada Dualogic permiten mejorar la eficiencia, además de colocar los dos turbodiésel y el gasolina de 1.2 litros, por debajo del límite que “invita” al pago del impuesto de matriculación.
Esta oferta en absoluto limita la variedad de posibilidades que ofrece este modelo. Si por algo destaca el 500C es por su capacidad para adaptarse a los gustos, preferencias e interpretaciones de cada usuario. Hasta un millón de posibilidades distintas de personalización (no seré yo el que haga el recuento) ofrece la nueva versión de este utilitario. Once colores de carrocería, tres de la capota, otros tantos en cuanto al acabado interior, serigrafías, llantas y hasta las carcasas de la llave intercambiables, convierten la nueva apuesta de Fiat en un vehículo al alcance de todos con un precio de partida ( versión Pop 1.2 8V 69 CV) de 13.155 euros.
