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El Astra saca músculo con el GTC

  • Sólo comparte con el Astra '5p' los retrovisores y la antena
  • La suspensión delantera monta torretas de altas prestaciones
  • Este modelo servirá de base para la versión OPC que llegará en 2012

Se avecina un otoño movidito en Opel. A los lanzamientos del Zafira Tourer y el abanderado de la nueva era híbrida/eléctrica dentro de la marca, se unirá la versión más deportiva, potente y excitante del Astra, el GTC. Cumpliendo su palabra, el fabricante alemán nos ha hecho llegar hoy nuevas imágenes y la primera información antes de que se presente a mediados de septiembre en el Salón de Frankfurt. De momento, desde este martes 7 de junio, ya se admiten pedidos de las tres motorizaciones que estarán disponibles cuando llegue a los concesionarios.

Será uno de los cabezas de cartel de esta edición del primer gran salón internacional del automóvil que se celebra tras las vacaciones y en Opel esperan que sea otro elemento dinamizador de las ventas. Desde una perspectiva global, el GTC ha representado entre el 15 y el 20 por ciento de las ventas totales de Astra y puesto que la generación actual ha ido incrementando su cuota de mercado, la carrocería ‘tres puertas’ puede romper esta marca.

En Opel lo definen como la quintaesencia en diseño y dinamismo de conducción del nuevo Astra. Lo sea o no, lo que no se le puede quitar es su aspecto tenso y afilado y el hecho de haberse atrevido a respetar en gran medida el Concepto Opel GTC París que se presentó en el salón de la capital francesa. Esto implica que no comparte ninguno de los elementos exteriores con los demás miembros de la familia Astra, excepto las carcasas de los retrovisores exteriores y la varilla de la antena de radio. Nada más. Hasta las llantas de entre 17 y 20 pulgadas (¡!) son exclusivas del GTC.

Hablamos por tanto de algo más que una versión para hablar de un modelo dentro de otro que saldrá en busca de un cliente con un perfil más atrevido y deportivo. Con una visión mucho más hedonista del automóvil y que quiere que la cara afilada y desafiante del Astra GTC sea el espejo de su alma. Aún así, no se despista en materia de confort y habitabilidad, ya que ofrece espacio para cinco ocupantes y su maletero tiene una capacidad de entre 370 y 1.235 litros.

Y es que su diseño es lo más impactante. El equipo de diseñadores de Rüsselsheim se plantearon elevar la tensión que transmite la carrocería, esa sensación de fiera a punto de lanzarse sobre su presa, limitando el número de líneas. Así, una fina y marcada arista que se curva hacia abajo desde la puerta delantera y a lo largo del estribo lateral es la que proporciona energía al lateral de la carrocería. Se mantiene la forma de álabe característica de Opel que se introduce en la misma dirección a imagen y semejanza del Insignia. Una segunda línea recorre desde la manilla de la puerta hasta la parte trasera, resaltando la silueta deportiva del vehículo. La tercera, acabada en aluminio pulido, sigue la silueta del techo marcando la línea de las ventanillas, lo que guía la vista hacia el acentuado spoiler integrado.  

Una cintura que insinúa 

El frontal, muy limpio, incorpora el típico pliegue central marca de la casa pero acentuándolo mediante unos intensos faros delanteros muy finos en forma de ojo de águila que incorporan las luces diurnas en forma de ala. Estos ‘ojos’ resaltan la calandra formada por una fina barra cromada con el logo y la parrilla trapezoidal que, para reforzar su aspecto de coche de carreras, está ubicada en una posición más baja.

Pero el sector del que más orgullosos están sus diseñadores es la cintura. Aquí la imagen es imponente y, en marcha, le da una inconfundible presencia sobre la carretera, destacando su silueta ancha y baja. Los LED traseros, con grafismos inspirados también en unas alas, tienen una función práctica, pero a la vez parecen subrayar la perfecta integración del alerón trasero en el techo.

Que el GTC es algo más que un epígrafe dentro de la gama Astra queda de nuevo demostrado al hablar de su tren rodante. El chasis electromecánico tiene una arquitectura de suspensión delantera desarrollada a partir del Insignia OPC, todo para poner la agilidad y la respuesta a la altura de lo que se espera de un coche de su aspecto.

Comparado con el cinco puertas, el Astra GTC es 15 mm más bajo, mientras que la base de sustentación se incrementa ligeramente. Debido a los brazos de control más largos en el eje trasero, la distancia entre ejes se incrementa en 10 mm, desde los 2.685 mm hasta los 2.695 mm. Ambas vías son más anchas, con 1.584 mm (+ 40 mm) en el eje delantero y 1.588 mm (+ 30 mm) en el trasero. Este detalle permite montar llantas con mayores diámetros, lo que beneficia tanto la estabilidad, como la presencia bien adaptada a la carretera y, por qué no, el impacto visual. Porque habrá quien busque sensaciones, pero también quien se decantará por él gracias a su aspecto.

Un tren de rodaje superdotado

Pero hay más y no se ve a simple vista. Independientemente de la motorización que equipen y de su nivel de acabado, todos los Astra GTC están equipadas con un elemento que sólo montan los deportivos más radicales: la suspensión delantera con Torretas de Altas Prestaciones (HiPerStruts). Comparadas con las McPherson convencionales del Astra, éstas reducen el ángulo de inclinación del pivote de la dirección, la geometría y la longitud de los ejes. Esto repercute en un mejor agarre y guiado de las ruedas, reduciendo de manera significativa las reacciones innobles de la dirección e incrementando la capacidad de giro. En definitiva, ofreciendo al conductor un tacto deportivo y una respuesta de dirección más ágil de dirección.

Y por supuesto, este chasis está preparado para integrar el sistema inteligente de suspensión completamente adaptativa FlexRide, un dispositivo que adapta el comportamiento de la amortiguación a las las condiciones de la carretera, la velocidad de paso por curva, los movimientos del vehículo y el estilo de conducción de cada uno y que tiene su razón de ser el modelos como éste. El conductor puede elegir entre el equilibrado modo Normal, que es completamente adaptativo, el modo Tour más cómodo o el deportivo modo Sport.

Ya desde un plano más cercano a la seguridad y al confort, el Astra GTC recibe en herencia el tesoro del inmenso bagaje de Opel en cuanto a nuevas tecnologías. Su equipamiento incluye la segunda generación del sistema de cámara frontal Opel Eye y el de Reconocimiento de Señales de Tráfico (TSR), ahora con capacidad para identificar un mayor número de señales que antes y cuya información puede ser ampliada por el sistema de navegación. Además del conocido Aviso de Abandono Involuntario de Carril (LDW), la cámara también soporta una nueva función de Indicación de la Distancia de Seguimiento (FDI) que visualmente informa al conductor sobre la distancia con el vehículo precedente.

Lo que sí que será una primicia en el Astra GTC es la cuarta generación del Sistema de Iluminación Adaptativa (AFL+) con faros bixenón. Además de las nueve funciones del AFL - que incluye el Asistente de Luces Largas que conecta y desconecta las luces largas dependiendo de la presencia de otros vehículos – se puede mejorar con el sistema de Regulación Inteligente de la Iluminación (ILR) que utiliza la cámara del Opel Eye para medir la distancia con el vehículo precedente y adapta continuamente el haz de luz corta. Esto permite optimizar continuamente la iluminación de la carretera evitando deslumbramientos.

Tres motores de partida

En cuanto a motorizaciones, el Astra GTC se puede pedir ya en España sobre tres opciones: un diesel y dos gasolina. El turbodiésel common-rail 2.0 CDTI se ha mejorado con una potencia elevada hasta los 165 CV. En él, la nueva tecnología Start/Stop de Opel que reduce el consumo en tráfico urbano se instala de serie. Este dispositivo también lo monta en todas sus versiones el motor 1.4 Turbo con 140 CV que completa la oferta de gasolina con el 1.6 Turbo de 180 CV.

Cuando se presente en el próximo Salón Internacional del Automóvil de Frankfurt se ofrecerán más motorizaciones. Las versiones más deportivas, incluyendo la futura versión OPC de altas prestaciones llegarán en 2012. A estas versiones más deportivas se unirá una nueva versión del motor 1.4 Turbo de gasolina de 120 CV y, al igual que la versión más potente, equipada con tecnología Start/Stop.

 

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