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Citroën DS3: un C3 de alta costura

  • C4 y C5 pasarán también por el tamiz de las siglas DS
  • Su catálogo ofrece 33 posibles personalizaciones de este modelo

Con esto de la crisis, el sector automovilístico anda patas arriba. Si la lógica del mercado debería imponer –e impone- opciones con buena relación calidad/precio, las marcas siguen creando a su alrededor una oferta de vehículos capaz de abarcar todas las posibilidades. Desde el más económico al más exclusivo. Y a esta tendencia no escapan tampoco las grandes marcas generalistas. Como Citroën, que ha creado una subgama denominada DS y que es algo así como la versión de alta costura de algunos de sus modelos más característicos.

Y el primero en experimentar este cambio de imagen ha sido el recién llegado C3 que pasa a llamarse Citroën DS3. Echando la vista atrás, seguro que recuerdan aquel primer Citroën DS. El ‘tiburón’, como se le acabó apodando, se convirtió desde mediados de los cincuenta en uno de los vehículos más sofisticados del mercado y también uno de los más exclusivos. Ese carácter opulento y emocional vuelve a la marca de los galones con las siglas DS que vertebrará su propia gama con los DS3, DS4 y DS5, las versiones Premium de los C3, C4 y C5 respectivamente.

El DS3 ya es una realidad y su diseño, una auténtica maravilla. Sin abandonar las líneas bien nítidas del C3, hay una mayor riqueza de detalles. Como la inconfundible línea de leds para la luz diurna, encastrada en una nervadura que en el C3 es un simple adorno en el paragolpes delantero. Son más las diferencias que las coincidencias a pesar de mantener intacto perfil, cotas y estructura, sobre todo porque en el DS3 nada es simple, todo es elegancia.

Sucede también en el interior, donde superficies, materiales y detalles se han mirado con lupa para propiciar ese ascenso de categoría de C a DS. En total, son siete las opciones de interior y múltiples combinaciones de texturas, materiales y colores. Y son precisamente esas inmensas posibilidades de personalización otra de las bazas del nuevo Citroën DS3, un plus que se da también en su exterior en aspectos como el techo, la carcasa de los espejos retrovisores o los tapabujes de las llantas. Cada DS3 puede estar hecho sino a imagen y semejanza de su dueño, por lo menos plegado a sus gustos. De hecho para el mercado canario las posibilidades de personalización y, por tanto, la inacabable lista de precios, supera las treinta entradas.

Los motores que animan el primer DS del siglo XXI son cinco. Tres gasolina –el 1.4 VTi de 95 CV, el 1.6 VTi de 120 CV y el 1.6 THP de inyección directa y sobrealimentado de 150 CV- y dos diesel: el 1.6 HDI de 90 y 110 CV.

Una versión racing

Y para los que valoran exclusividad, pero también provocación y prestaciones, hace poco se ha confirmado el lanzamiento de una serie limitada del DS3 auspiciada por Citroën Racing. Al fin y al cabo, la marca de los galones ha elegido al DS3 para abrir camino en la nueva etapa que el Mundial de Rallys iniciará a partir del año que viene y esta serie especial aprovecha esta evolución.

Para ver rodar una de las mil unidades que se van a fabricar habrá que esperar hasta el segundo trimestre de este año. Aquí las diferencias saltan a la vista, con su vistosa decoración en color gris y naranja y por el uso generalizado de fibra de carbono en paragolpes, faldones, difusor trasero y aletines, además de en diferentes detalles del interior como el frontal del salpicadero, en los paneles de las puertas o en el embellecedor del volante.

El motor escogido es el 1.6 THP, esta vez con 200 CV de potencia gracias a una nueva gestión electrónica y un nuevo sistema de escape. En lo que respecta a su estructura y fruto de esas mayores prestaciones, las vías de este Citroën DS3 Racing se ensanchan 30 mm, además de variar la puesta a punto de la dirección, las suspensiones –con unos muelles 15 mm más cortos y más duros) y un ESP reprogramado.

Como ven, Citroën aprovecha su DS3 no sólo para crear un modelo con el que atacar un cada vez más pujante segmento de los utilitarios Premium, además, lo emplea para contar con una versión de altas prestaciones, como han hecho Mini con su Cooper S, Abarth con el Grande Punto, Renault con su Clio RS, Seat con su Ibiza Cupra, Opel con el Corsa OPC, Volkswagen con el GTI o Peugeot con su 207 RC. Estilo y deportividad en unas siglas, DS, que a partir de ahora darán mucho que hablar.

Autor
Róber Martí
Periodista. Ha sido redactor del periódico Superdeporte así como en otros medios de especializados como Motor 2000 o Canarias Racing. Ha colaborado en Radio Marca, COPE y actualmente codirige el programa Motor en la Onda de Onda Cero Canarias.
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