El Rally de Gales GB coronará al nuevo campeón del mundo en un certamen que se iniciaba en las carreteras heladas de Suecia y que terminará bajo la habitual lluvia de Gran Bretaña donde el frío y el barro se convierten en una constante. La prueba se desarrollará sobre un rutómetro prácticamente inédito para los participantes. La salida se dará el jueves en Llandudno, al norte del país. Los tramos estarán centrados alrededor de la pequeña ciudad de Builth Wells. Los coches no volverán a Cardiff excepto para el parque cerrado y el podio.
En España el equipo Citroën Total Word Rally Team conseguía su séptimo título mundial de Constructores y ahora se aferra a las posibilidades que ofrece su jefe de filas, Sebastian Loeb que parte como líder en la clasificación con ocho puntos de ventaja sobre su más inmediato perseguidor, Mikko Hirvonnen. El siete veces campeón del mundo ha ganado cinco rallys esta temporada (México, Cerdeña, Argentina, Finlandia y España) dispuesto a seguir haciendo historia si consigue batir su propio récord de campeonatos. “La situación es como la de 2009. Empezamos el Rally de Gran Bretaña codo con codo con Mikko Hirvonen y quien terminara delante era el campeón del mundo,” recuerda Sebastien Loeb. “Naturalmente, es menos estresante intentar ganar el título cuando no es la última prueba. Te puedes decir que en caso de problemas ¡habrá otras oportunidades! Esta vez es ¡ahora o nunca! Debemos intentar ignorar la presión adicional debida a lo que nos jugamos”.
La situación no es nada cómoda para ninguno de los dos. La experiencia del francés le dicta que su objetivo debe ser estar siempre por delante de su rival, independientemente de su situación en la tabla clasificatoria. "Mi objetivo no será ganar a cualquier precio, sino administrar mi carrera dependiendo de cómo vaya Mikko. No me importa si Ogier, Solberg o Latvala están en cabeza siempre que yo esté delante de mi rival”.
Sebastian Ogier ha tenido finalmente que sucumbir a las exigencias de su equipo como fiel escudero de su compañero Loeb que sin la presión de tener que conseguir puntos para su equipo tendrá las puertas abiertas para aspirar a todo en Gran Bretaña. Su abandono en España le impide partir con opciones al campeonato sin embargo su trayectoria esta temporada con cinco victorias al igual que Loeb (Portugal, Jordania, Grecia, Alemania y Francia) lo sitúan como una de las más firmes promesas en el WRC, esté donde esté a partir de la próxima temporada. "Estoy contento de volver a competir en esta prueba, aunque no me trae buenos recuerdos. Con el título de constructores ya decidido, puedo pilotar sin presión por tener que conseguir puntos para el equipo. Acabar en el podio sería un buen resultado para mí. Respecto al Campeonato del Mundo de Pilotos, Seb está decidido a ser el dueño de su propio destino terminando delante de Mikko, pero naturalmente, si las circunstancias lo requieren haré todo lo que pueda para ayudarle a ganar el título”.
