Si Renault hubiera respetado el nombre original que se le ha dado a esta serie en Francia entenderíamos mejor el porqué de esas 666 copias para toda Europa. ‘Angel&Démon’, denominación que se ha mantenido en la placa identificativa y numerada del interior, nos remite a esa conexión diabólica de un coche que conserva intactos los 201 CV de su motor ‘dos litros’ y unas cifras que más que miedo, dan envidia: 6,9 segundos para pasar de 0 a 100 km/h y una velocidad máxima de 225 km/h.
En mercados como el alemán se optó por el nombre ‘Sport Auto Edition’ y ‘Raider’ para el británico. En España sólo habrá catorce unidades con esa denominación Légend y con su propia chapa identificativa que irá del 001 al 015 pero saltándose (lagarto lagarto) el 013... Al fin y al cabo, se trata de lo mismo, un Clio RS con algunos detalles de equipamiento que le aportan un extra de personalidad casi gótica. Porque además de la placa numerada que juega con ese carácter antagónico que va desde lo angelical de un utilitario para ir a clase hasta el demoniaco que aflora entre curva y curva, el negro es el tono que predomina en techo, llantas, retrovisores exteriores y hasta los tiradores de las puertas.
Por tener un acabado lacado estos detalles van a juego con los cristales tintados, pero contrastan con la terminación mate de la pintura de la carrocería, salvo si se opta por el blanco. Las llantas de 18’’ calzan unos neumáticos Bridgestone RE05A, los mismos que monta el Mégane RS Trophy, detalle que nos da una idea de las posibilidades de agarre que ofrecen.
La cabina también incluye pequeñas modificaciones que van en la misma dirección, la de la personalización. Son de serie las alfombrillas, los asientos deportivos Recaro vestidos con piel y algunas inserciones metálicas. El equipamiento también es más rico en el Clio RS Légend al incorporar el climatizador, Bluetooth, equipo de audio integrado con entrada de USB y se puede escoger entre un navegador o el sistema de telemetría, el RS Monitor que Renault reserva para sus modelos más extremadamente deportivos.
Ha sido el concesionario para Las Palmas de Gran Canaria Rafael Afonso, siempre dispuesto a apostar por las versiones más decididamente deportivas de Renault, el que ha querido disponer primero que nadie de una de las catorce unidades reservadas para el mercado español. Actualmente sólo dos concesiones de nuestro país dispone de uno en su exposición, uno de ellos en Miller Bajo, en Las Palmas de Gran Canaria. Su precio es de 26.274 euros.
