DEPORTE
WRC

Ogier doblega a Bouffier y ya es líder

  • Latvala se hizo con un scratch y remontó hasta el quinto puesto

Vuelta a la normalidad en el 82 Rally Montecarlo después de una primera etapa absolutamente loca. La climatología se ha estabilizado este viernes y aunque el hielo ha jugado muy malas pasadas a algunos pilotos como Robert Kubica, nada que ver con lo que se vivió el jueves.

Esa cierta calma ha propiciado que Sébastien Ogier (Volkswagen Polo R WRC) haya podido mantener su ataque total para hacer que la ventaja que mantenía su compatriota Bryan Bouffier (Ford Fiesta RS WRC) se esfumara. El vigente campeón del mundo tuvo un sensacional feeling con su coche en el crucial tramo de ‘Vitrolles-Fayes’, de 49 kilómetros, y ahí se ha fraguado su remontada.

Aunque Bouffier ha vuelto a demostrar que se le dan bien los rallies con condiciones de agarre muy cambiantes y llegó incluso a romper una racha de tres scratch consecutivos del de Gap, acabó capitulando tras el segundo paso por esta larga especial al hacer un trompo y necesitar de la ayuda del público para volver a la carretera. En racha, Ogier mantuvo la tensión para acabar el día líder en solitario con 51,1’’ y al borde de su primera victoria en este mítico rally. 

Pero ojo que aún queda que entre en escena el juez supremo del Montecarlo. Este sábado llega el Col del Turini, con dos bucles formados por La Bollène Vésubie – Col de Turini – Moulinet (23,40 km) y Sospel – Col de Brouis – Breil sur Roya (16,55 km). La llegada está prevista a las 22:41 horas de la noche. 

Los pilotos de Citroën Racing miraban con buenos ojos empezar el año en el podio y de momento están cumpliendo su misión. Kris Meeke (Citroën DS3 WRC) ocupa esa tercera plaza y desde el noveno tramo pudo respirar tranquilo después de que Robert Kubica (Ford Fiesta RS WRC) sufriera una fuerte salida de carretera en el TC9. Vuelta a las andadas del polaco que, aún así, dio una muestra del enorme talento que atesora en la primera etapa del jueves.

Kubica y Meeke estaban en ese momento enfrascados en una lucha sin cuartel, pero la baja del piloto de Lotos dejó al norirlandés solo a un minuto de Bouffier y casi a la misma diferencia de su compañero de equipo Mads Ostberg, cuarto algo más a tono en esta segunda etapa. El noruego también respiró cuando Jari-Matti Latvala pinchó en el décimo tramo y se descolgó en la clasificación hasta la octava plaza.

Pero el finlandés, que había pasado bastante desapercibido durante buena parte de la jornada, dio un acelerón en los dos últimos tramos del día para dar caza primero a un Mikko Hirvonen (Citroën DS3 WRC) inofensivo y, en última instancia y vía scratch, a un Elfyn Evans que se había mantenido cerca de los puestos nobles gracias a su regularidad. El escocés se estrena en este rally como oficial de M-Sport con un Ford Fiesta RS WRC y terminó la etapa sexto entre los dos finlandeses.

Andreas Mikkelsen también perdió fuelle en la clasificación al pinchar en el décimo tramo para acabar la jornada en octava plaza.

 

 

 

 

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