El relevo de los nuevos R5 a los Súper 2000 en el European Rally Championship no va a ser rápido. Al margen de que sea una nueva categoría cuyas unidades siguen llegando a cuentagotas, los nuevos coches con motor 1.6 turbo siguen sin tener toda la fiabilidad que los equipos quisieran. Incluidos vehículos oficiales como el 208 T16 de Peugeot Sport.
Debutaron en Grecia y tanto allí como en Irlanda y, este pasado fin de semana, en Azores, nunca han llegado las dos unidades a meta. En la prueba de asfalto ninguna de las dos, y siempre por fallos de la mecánica. En el rally luso Kevin Abbring logró acabar por primera vez y con el premio del segundo puesto. Acarició la victoria, pero la rotura de la dirección asistida permitió que Bernardo Sousa le diera caza y le ganara la partida en la última etapa. El equipo francés ha explicado que la avería se debió muy posiblemente al golpe de una piedra.
“Una vez más el equipo ha mostrado el potencial del 208 T16. Lideramos con ambos coches desde el inicio. Ha sido mi primera vez en Azores y, mirando atrás, estoy satisfecho con mi rendimiento. Tuvimos mala suerte con el problema en la dirección y no hay duda de que por ello no ganamos. Me las arreglé para luchar pero no pude recuperar suficiente tiempo. Estamos aprendiendo todo el tiempo y estamos conociendo el coche cada vez mejor. Estoy contento de haber sido tan competitivo en mi primera participación con el T16”, declaró el holandés que llegó a poner contra las cuerdas a Sousa en los últimos tramos.
Más razones para estar enfadado tenía Craig Breen. El irlandés tuvo que abandonar el rally cuando lo iba liderando después de que los conductores de la bobina se quemaran y no pudiera arrancar el coche nada más acabar el TC9. Era su segundo abandono consecutivo después de Irlanda, cediendo demasiados puntos cuando el siguiente rally, el de Ypres, tendrá doble oposición de los pilotos de Skoda.
“El coche es rápido. Estoy satisfecho con la velocidad del 208 T16, así como con Scott y conmigo mismo. El problema que tuvimos en Irlanda ya ha quedado atrás. El que nos detuvo en Azores fue totalmente distinto. Sé que Peugeot Sport está ya trabajando duro para asegurarse de que no vamos a tener ningún problema más. Ahora el objetivo es ganar a Freddy Loix cuando tengamos el Rally de Ypres en Bélgica”, señaló Breen.
