Nil Solans dejó atrás en el RallyRACC España Cataluña del pasado año la etiqueta de novato. Su victoria en la que fue la última prueba de la primera edición del Drive DMack Fiesta Trophy dejó claro que, en caso de repetir, estaría entre los cabezas de serie de esta copa que pone en juego una temporada en WRC2 con un Ford Fiesta R5.
Aunque inicialmente puso rumbo hacia otras competiciones, finalmente el joven catalán ha decidido repetir y en el Rally de Portugal que se celebra este fin de semana medirá sus fuerzas y su nivel con sus diez rivales. Va a ser su segunda participación en la cita lusa, aunque la experiencia del pasado le va a valer de poco, ya que tras 14 años vuelve a las carreteras del norte del país.
“Serán unos tramos nuevos para todos y con un coche diferente al del año pasado, que no he podido probar todavía. Espero hacer unas buenas notas en los reconocimientos y coger el feeling lo antes posible al nuevo motor turbo del Fiesta R2. El año pasado marcamos algún crono destacable en las pistas del Algarve. Esta vez, como el rally ha cambiado de emplazamiento, los pilotos con menos experiencia en el Mundial llegamos en las mismas condiciones que el resto. Quiero luchar por ganar”, confirma Solans, que llega con un buen número de kilómetros encima tras tomar parte en tres citas del CERT y una del CERA.
“Tengo muchas ganas de comenzar mi segunda temporada en el Mundial. Estoy muy agradecido tanto a mi padre, como al RACC y a todos mis patrocinadores por haberme dado la oportunidad de volver a disputar el ‘Drive DMACK Fiesta Trophy’, un campeonato de promoción para jóvenes pilotos que intentaré ganar esta temporada, aunque soy consciente de que no va a resultar nada fácil”, ha añadido.
Nuevo coche
La gran novedad de esta segunda edición del Drive DMack Fiesta Trophy es la sustitución del viejo Ford Fiesta R2 con motor 1.6 atmosférico por el nuevo con uno 1.0 tricilíndrico sobrealimentado. Homologado el pasado 1 de mayo, M-Sport empezó con su desarrollo a finales de la temporada pasada con el campeón del pasado año, Sander Pärn, además de Elfyn Evans, Mathew Wilson y John MacCrone como pilotos de pruebas.
Es el primer vehículo que aprovecha la nueva normativa que permite homologar dentro de la categoría R2 motores 1.0 y en su preparación para la competición, M-Sport trabajó codo con codo con los ingenieros europeos de Ford. Son 180 CV de potencia y 250 Nm de par máximo rodeados de mejoras en la caja de cambios, suspensiones, electrónica y equipo de frenos.
