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Pregunta.– Cinco victorias en seis participaciones; casi dos rallies de margen respecto al segundo clasificado (67 puntos)... ¿Está el título casi hecho?
Respuesta.– No, qué va. Aún se nos pueden cruzar las cosas en los cuatro rallies que quedan porque siempre puede haber un accidente o una avería. En realidad, por nuestra manera de ver las carreras, nunca habíamos pensado en el campeonato.
P.– ¿En qué se diferencia tu manera de ver los rallies a la de otros?
R.– Desde que competía de niño, mi filosofía siempre ha sido la de disfrutar de cada rally y ya está. Sin otra perspectiva. A veces, cuando nos hemos visto con el número uno en el coche, le digo a Rebeca que parece que hace nada que estaba en la cuneta viendo el CERA y, para mí, quien llevaba el uno era lo máximo. Ahora nos vemos aquí, saliendo los primeros, liderando el campeonato y a veces tenemos esa sensación como que no pintamos nada... (Risas)
P.– La estadística dice que nadie con tus números ha perdido el campeonato en la última década. ¿Es lo bastante rotundo el dato?
R.– Sí, eso es algo a lo que podemos aferrarnos ahora mismo. Ojalá nada se tuerza y podamos conseguir ganar el nacional. Sería cumplir un sueño que uno tiene desde niño, desde que iba a los tramos con mi padre para ver los rallies.
P.– ¿Cuál crees que ha sido la clave de esta parte de la temporada que terminó en Ourense?
R.– Pues para mí, el primer rally, el Islas Canarias. Además de por tener coeficiente 1,5, porque cogimos un ritmo muy bueno y esa victoria hizo que nos tomáramos nuestras participaciones con muchas más ganas. Luego llegó Tenerife, donde Edu y yo no nos creíamos capaces de repetir ese resultado, y ya todo se puso de cara. Esas dos carreras fueron muy importantes, pero la de Gran Canaria, más. 
P.– Todos señalan la superioridad del N Plus ‘R4’ respecto a los R5 y GT como la verdadera clave. ¿Crees que es así?
R.– En esto, como en todo, el que no llora no mama. Cuando no salen las cosas surgen este tipo de comentarios, pero la gente se olvida de que los R5 nos han estado echando carreras esta temporada. ¿Que el Mitsubishi es superior al año pasado? Con los frenos y el cambio el coche ha evolucionado, sí, pero donde he notado una mayor mejoría es que la confianza con la que conduzco esta temporada. Además, considero que la victoria de Canarias nos dio ese plus de confianza, pero se suma todo. El coche ha mejorado, pero yo también he mejorado mucho respecto a mi primer año con el Evo.
P.– ¿Te molesta que siempre se justifique tu situación en el campeonato basándose en esa superioridad el Mitsubishi?
R.– Molesta porque lo dicen, pero luego no lo piensan. Pero es lo que toca y, sinceramente, sabía que iba a ser así.
P.– ¿Entenderías que el año que viene se le corte las alas al Evo X?
R.– En la reunión (la celebrada en Ourense como primera toma de contacto para establecer el reglamento técnico de 2017, nota del redactor) dije que me daba igual. Sé que el coche no lo es todo y si puedo seguir corriendo no me voy a preocupar de este tipo de cosas. Seguiré saliendo, como ahora, a disfrutar, porque es así como me tomo este deporte.
P.– ¿Hacia dónde te gustaría dirigir tu camino en 2017?
R.– No lo sé. Depende del reglamento. Si finalmente se va a normativa FIA cien por cien supongo que no podré seguir corriendo porque no hay posibilidad ni de comprar ni de alquilar un R5. Ya se irá viendo, pero yo estoy muy bien donde estoy ahora mismo.
P.– ¿Podría ser un N5 o Maxi Rally una alternativa para Mitsubishi?
R.– No lo sé, pero creo que los Maxi Rally aún se tienen que desarrollar mucho para que sean una opción.
P.– ¿Qué derroteros consideras que debería tomar el CERA en su norma técnica?
R.– En principio parece que debía dirigirse poco a poco hacia la norma FIA, pero hay muchos equipos como el mío que ya no podrían seguir compitiendo. En mi opinión, ahora mismo supondría ‘cargarse’ el campeonato porque no hay coches suficientes para ese cambio. ¿Mi opinión? Dejaría las dos cosas igualando cada categoría como se ha intentado hacer estos últimos años.
