DEPORTE
CERA

La hora de Monarri

  • Vallejo, el mejor R5
  • Victoria y título para Vallín en la R2
  • Primer podio de Pablo Suárez en la Sandero Cup

Llevaba mucho, mucho tiempo peleando, contumaz, en pos de este objetivo. Y ayer, después de tantos años en la pomada, finalmente, lo cumplió. Monarri estrenó su casillero dentro del Campeonato de España de Asfalto al proclamarse ganador del Rallye La Nucía. A punto de culminar la primera temporada de su extensa carrera en la que ha dispuesto, ya sí, de la montura idónea para aspirar a ganar, el piloto de Majadahonda sentenció, de una vez por todas, su primer triunfo absoluto de su historial deportivo.

El destino le debía un alegrón semejante desde el Rallye Comunidad de Madrid de 2010. Y este fin de semana, cinco años después, por fin, se la devolvió.

En aquel rallye, una salida de pista le truncó la victoria que iba camino de rematar al volante de un Subaru Impreza de la categoría Grupo N+ con el que doblegó ese día, en los tramos de la capital, a los Porsche y a los S2000 que protagonizaban entonces el Nacional. Ayer, en La Nucía, se cambiaron las tornas, y esta vez, en otro desenlace inesperado, fue él -como en su día Burgo- quien resultó felizmente vencedor.

A pesar de las lluvias que comenzaron a jarrear antes del último bucle, Cristian García -proclamado ya campeón en Llanes- tenía la situación encarrilada para adjudicarse su enésimo triunfo de la temporada. El piloto de RMC se había batido en los primeros compases con el 208 R5 de Calm, que había alquilado Solans para este rallye. Pero a raíz de la retirada del catalán -arrancó una rueda en la tercera especial, cuando lideraba por la mínima-, y al sucesisivo abandono de Fuster -el ídolo local- por rotura del alternador, el joven aragonés necesitó solamente un par de tramos para destacarse con claridad al frente de la general.

A falta de la última sección, García aventajaba por más de medio minuto a Monarri, que parecía obligado a contentarse de nuevo con el segundo puesto. Los dos puntales del equipo Mitsubishi iban ya encaminados hacia un nuevo doblete. Pero, una vez más, como era tradición años ha, las hadas alicantinas sobrevinieron al caer la noche en las cunetas de Relleu, conjurando un vuelco inesperado a la general del Rallye Mediterráneo en su regreso al Nacional.

García hizo un trompo en la oscuridad, sobre el húmedo asfalto de Tudons, cuando iba camino de sentenciar su sexto triunfo con el R4. Por si fuera poco, después de reemprender la marcha pinchó. El nuevo campeón de España vivió así una auténtica debacle en el último tramo que le alejó hasta la vigésima posición final, y recondujo a su vez el triunfo hacia las manos de Monarri.

El madrileño adelantó en plena especial a Cristian, y se encontró así, de rebote, en un desenlace absolutamente impredecible, su primer trofeo como ganador de una prueba del Nacional. Un galardón ansiado desde hacía años, que él y su copiloto, Rodrigo Sanjuán, festejaron con júbilo en el podio de La Nucía, donde estuvieron acompañados por dos parejas de hermanos, ambas de Lugo: los Vallejo -primeros clasificados entre los vehículos FIA- y los Burgo -segundos con uno de los Porsche que ya tienen vendido-.

Marbán situó su Lotus Exige en cuarta posición, por delante del Fiesta R5 de Carnicer, campeón provincial, el mejor clasificado de la representación local.

Vallín sentenció a lo grande el Trofeo de España de R2, logrando una nueva victoria al volante de su Opel Adam, con el que se ha mostrado muy superior durante todo el año. El asturiano ganó, además, la categoría de Dos Ruedas Motrices, en la que precedió a Peláez y a Díaz, proclamado ya campeón en este apartado con el Swift S1600 del equipo Suzuki.

Paniceres se impuso in extremis entre los júnior, al doblegar en el último tramo, por solo 2"1, a Pardo. Jan Solans se situó a continuación y cantó el alirón, con solo 18 añitos, en el Trofeo de España de Grupo N.

Llarena volvió a batir a todos sus rivales de la Copa Suzuki, aunque esta vez se vio superado a igualdad de montura por Vinyes, el más rápido de la categoría N3 en su segunda participación en el Nacional tras una larga lesión.

Pérez logró su primera victoria de la Sandero Cup en los tramos de casa, donde el canario Pablo Suárez logró su mejor resultado hasta la fecha dentro del Nacional: segundo, a espaldas de Bouza, proclamado ya campeón de esta monomarca gracias al abandono de García, accidentado a mediodía, cuando marchaba líder.

Autor
Nacho Villarín
Periodista por vocación. Apasionado al motor desde crío. Especialista en rallyes de MARCA. Colaborador de MotorEnLínea, TodoRacing, Turini y Vuelta Rápida GT.
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