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Ford Grand C-Max: uno más en la familia

  • Tiene una distancia entre ejes 140 mm más larga y es 58 mm más alto
  • En su diseño, las dos versiones son idénticas hasta el pilar B

Si hace una semana fisgamos en la segunda generación del C-Max, ahora nos centramos en su mellizo, el Grand C-Max. Como explicamos, los estudios de mercado de Ford revelaron que la mitad de los compradores de monovolúmenes compactos buscan en realidad espacio para seis o siete asientos y para cubrir esa necesidad de familias en proceso de crecimiento –y de paso para igualar la oferta de otras marcas- ha visto la luz el Grand C-Max, un coche que según la marca, combina la versatilidad y la calidad de conducción del modelo original con esa capacidad adicional.

Con el fin de ofrecer ese espacio extra, el Grand C-Max tiene una distancia entre ejes 140 mm más larga y es 58 mm más alto que el C-Max. Dentro de su longitud total de 4,52 metros se tratado de crear un gran espacio para siete pasajeros, o cinco ocupantes con una generosa capacidad para el equipaje (475 litros con sólo dos filas de asientos).

Como su hermano, el Grand C-Max apuesta por un atrevido diseño exterior pronunciando el mismo lenguaje de formas kinetic design de Ford, que tan bien suenan de la boca de los nuevos Fiesta, Kuga o Mondeo. Los elementos del kinetic design aplicados a los nuevos modelos incluyen la dinámica línea de cintura ascendente, las superficies recortadas, los atrevidos pasos de rueda, una fuerte y atlética trasera soportada por una prominente línea inferior y el distintivo gráfico ascendente desde la ventanilla al pilar C.

Aunque los dos modelos son idénticos hasta el pilar B, el Grand C-Max tienen caracteres en el último cuarto trasero y en su perfil, con las puertas correderas traseras como principal detalle identificativo. No pierde de vista esa energía que desde siempre ha definido al C- Max, pero su enfoque más funcional obliga a presumir de espacio y versatilidad a través del corte de su zaga. Con una mayor batalla, el modelo de siete plazas presenta una línea de techo más alta y pilares más finos que enfatizan el generoso espacio y la visibilidad ofrecidos en el habitáculo, además de restituir el equilibrio visual.

Las dobles puertas deslizantes -por vez primera en un vehículo de Ford en Europa- quedan limpiamente integradas con el raíl disimulado por la línea que subraya el perfil del vehículo. El diseño del gran portón trasero asegura una baja altura de carga, mientras que la elegante intersección entre las luces y el cristal traseros ofrece un parecido similar al Galaxy, el vehículo de pasajeros más grande de Ford. El frontal presenta la parrilla inferior trapezoidal característica de Ford –con marcos cromados en los modelos de series altas– junto con un llamativo tratamiento de los nuevos faros anticipado ya en el iosis Max concept.

Un interior estudiado

La distribución de asientos y puertas se concretó después de un detallado estudio con usuarios familiares típicos para identificar las configuraciones más populares. Fruto de ese trabajo de campo, el Grand C-Max propone un nuevo concepto de asientos para la segunda fila, con un mecanismo que permite el pliegue rápido y fácil del asiento central debajo del asiento derecho, creando un espacio de paso entre los dos asientos exteriores para que los pasajeros puedan acceder con facilidad a la tercera fila.

Dentro, el puesto de conducción -que es común en los dos modelos- ofrece una posición de conducción elevada tipo ‘puente de mando’, con la palanca de cambio y la consola central en posición alta. Los controles y mandos del conductor incorporan la próxima generación del sistema Human Machine Interface (HMI) de Ford, que se basa en la distribución de espacios introducida en el Fiesta y el Mondeo.

Los motores

En cuanto a mecánicas, el como su hermano, el Grand C-Max también avanza nuevas tecnologías de Ford en el segmento C. Así, culminando la gama de motores de gasolina está la primera aplicación del nuevo motor 1.6 Ford EcoBoost de 4 cilindros de gasolina, disponible en dos impetuosas versiones de 150 y 180 CV. Este motor pertenece a una generación totalmente nueva de motores de gasolina de Ford de menor cilindrada, alta eficiencia y bajo CO2, es decir, un ejemplo de libro del downsizing. Desarrollado para su aplicación global en Europa, la mecánica EcoBoost 1.6 de gasolina combina inyección directa de alta presión, turbocompresor de baja inercia y doble distribución variable independiente de válvulas para ofrecer significativas reducciones en consumos y emisiones de CO2. La paleta de mecánicas gasolina la completan las Duratec Ti-VCT 1.6 de doble distribución variable independiente, con potencias de 105 CV y 125 CV.

La gama diesel presenta versiones potenciadas de los motores Duratorq TDCi de 1.6 y 2.0 litros. El primero se ofrece con potencias de 95 y 115 CV y el 2.0 con 140 ó 163 CV. Además, la gama C-Max también incorpora otros equipamientos del programa Ford ECOnetic Technologies para ayudar a rebajar esos dos factores. El primero, lo que Ford llama Eco Mode, un indicador de cambio de marcha Gear Shift Indicator Light y el sistema de recarga inteligente Smart Regenerative Charging.

Tecnología útil

En materia de dinamismo, Ford ha confiado en la tecnología para implementar sus posibilidades y conservar así esa vitola de monovolumen compacto de corte deportivo. Por ello, el nuevo C-Max estrena un sistema de dirección asistida eléctrica (EPAS), nuevos diseños optimizados para la suspensión trasera Control Blade multibrazo y el subchasis semiaislado delantero, y el montaje de serie de un avanzado nuevo sistema de control de par Torque Vectoring Control (TVC) para mejorar aún más la estabilidad y agilidad en curva al imitar el comportamiento de un diferencial autoblocante.

También se apuesta por los últimos avances tecnológicos en los nuevos asistentes de conducción, muchos de ellos, primicia dentro de la gama Ford. Es el caso del Active Park Assist, un asistente capaz de aparcar automáticamente el vehículo en espacios en paralelo al estilo del Park Assist de Volkswagen. También es nuevo el sistema de información sobre puntos ciegos Blind Spot Information System, un dispositivo que utiliza dos módulos de radar de rayos múltiples ubicados en las esquinas exteriores del parachoques trasero para identificar cuándo un vehículo entra en la zona de punto ciego definida e ilumina una luz indicadora tipo LED en el espejo retrovisor del lado correspondiente para avisar al conductor que hay un vehículo pasando al lado. Más comunes son el limitador de velocidad, la cámara de visión trasera o el asistente de arranque en pendiente.

Tanto el C-MAX como el Grand C-MAX están disponibles en una gama de once acabados de pintura exterior, incluyendo dos nuevos colores metalizados: Midnight Sky, un sofisticado tono en gris azul, y Mars Red, un chocante color en rojo bronce. La Red Ford de Canarias ya ha iniciado su comercialización desde este mismo mes de noviembre con un precio de partida para la versión 1.6 Ti VCT de 95 CV de 18.300 euros.

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