La influencia del nuevo Audi Q8 ya se está haciendo notar. La renovación de la familia Q hereda ciertas reminiscencias de su nuevo buque insignia no sólo a nivel estético sino también al ofrecer mejoras en habitabilidad, versatilidad y una oferta ampliada de soluciones de conectividad.
El aumento de sus proporciones es notorio. El nuevo Q3 crece hasta los 4,49 metros de largo y los 1,85 de ancho mientras la altura -1,59 metros- permanece invariable. La batalla también aumenta en 77 mm, signo inequívoco de un compromiso más firme por el confort y la practicidad. El enfoque también cambia, en esta ocasión no podríamos estar más de acuerdo con el fabricante y frente a la sutiliza de formas de la generación anterior, ahora se nos muestra un modelo más rudo y musculado –masculinizado apunta la marca- pero sin perder ni un ápice de clara distinción lo que sin duda les permitirá ampliar sus objetivos comerciales.
Buena parte de la responsabilidad de su nueva imagen recae en el frontal. La disposición de la nueva parrilla octogonal, las generosas tomas de aire laterales y los nuevos grupos ópticos –en tres versiones incluidos los faros Matrix LED- ensanchan y achatan su semblante, enfatizado por la prominencia de los paneles laterales asociados a los pasos de rueda. En la zaga, el spoiler junto al marco que rodea la luneta trasera y los pilares D inclinados rejuvenecen todo el conjunto y vigorizan su naturaleza atlética.
En el habitáculo de nuevo se pone en evidencia que la digitalización ya no es un rara avis sino la manera más inteligente de armonizar la vida a bordo simplificando la interacción entre el usuario y las distintas funciones y servicios que puede ofrecer el vehículo. El elemento principal, el MMI touch, se enmarca sobre un acabado black panel situado en el frontal del salpicadero. El cuadro de instrumentos digital, incluido en el paquete de info-entretenimiento Audi virtual cockpit plus, asciende a un plano superior quedando enmarcado a la vista del conductor por el arco superior del volante.
Entre los procedimientos de acceso se encuentra el control por voz con reconocimiento de expresiones: la respuesta atiende a la información almacenada en el vehículo, así como a los datos en la nube. Los servicios asociados a la plataforma Audi connect amplían las posibilidades de conectividad atendiendo a rutinas para mejorar la navegación y la interacción frente a las situaciones del tráfico. Todos estos procesos también están disponibles a través de la aplicación myAudi.
Una gama de módulos de conexión completan los sistemas de infotainment, incluyendo el Audi phone box, que enlaza el smartphone del propietario del vehículo con la antena del coche y carga el teléfono de forma inductiva mediante el estándar Qi. También está disponible en opción un sistema de sonido Bang & Olufsen Premium que proporciona sonido en tres dimensiones, utilizando un total de 15 altavoces.
El nuevo Audi Q3 incorpora entre los sistemas activos de asistencia a la conducción el asistente de conducción adaptativo. Este incluye las funciones de asistente de velocidad adaptativo, asistencia en tráfico congestionado (Audi traffic jam assist) y el asistente de mantenimiento de carril. A su vez se ha añadido cuatro cámaras 360 grados para facilitar las maniobras de aparcamiento o franqueo de obstáculos. La información se muestra en la pantalla del sistema de info-entretenimiento. Otros sistemas asociados a las funciones de confort son el park assist y el asistente de tráfico trasero cruzado que dirige automáticamente el vehículo para entrar y salir del lugar de aparcamiento. El conductor sólo tiene que acelerar, frenar y seleccionar la marcha.
A falta de concretar la oferta prevista por Audi Canarias para el archipiélago, la marca ofrece hasta cuatro variantes de motorización, tres TFSI y un TDI en combinación con la tracción delantera o la integral quattro. El rango de potencia se sitúa entre los 150 y loa 230 CV y todos son cuatro cilindros, con inyección directa y turbocompresor. Para transmitir la potencia a las ruedas se utiliza un cambio de marchas manual de seis velocidades, o el rápido S tronic de siete relaciones. A su vez incorpora control de descenso, que se activa mediante un botón, mantiene la velocidad seleccionada al afrontar una pendiente con gran desnivel.
El sistema de conducción dinámica Audi drive select ofrece en esta ocasión hasta seis programas, desde uno claramente orientado al confort hasta el enfocado a la eficiencia, pasando por el modo deportivo. El sistema también influye sobre la suspensión con control de la amortiguación (damper control) opcional, para mejorar el comportamiento dinámico y aumentar el confort. Alternativamente, se ofrece una suspensión sport (de serie con el paquete S line exterior) con una especificación más firme de los muelles y de los amortiguadores, y con una dirección progresiva.