“Marco y Alfonso mejoraron el debut de uno y otro con sus antiguos coches. Creo que en su experiencia, los dos han crecido como pilotos”. Fernando Capdevila está muy satisfecho del papel de sus pupilos. Lorenzo, Viera y Cruz obtuvieron el pasado sábado “el mejor resultado posible”, aunque no por ello previsible. Sobre todo porque en el caso del campeón y el subcampeón regional de Canarias el Rally Villa de Santa Brígida no iba a ser en absoluto sencillo.
Aunque Marco había acumulado alrededor de un centenar de kilómetros con el Focus RS WRC en los test que realizaron a principios de marzo en el Circuito de Maspalomas, la carrera del sábado era el verdadero examen para saber si su equipo hacía o no el esfuerzo de inscribirlo en el Rally Islas Canarias ‘El Corte Inglés’. La n
ota, el resultado de la prueba, ya lo saben. “Dependía de la adaptación de Marco al coche. Si no estaba en buenas condiciones de poder plantar batalla por el triunfo en el Islas Canarias no merecía la pena”, admite Capdevila, “pero hizo un rally muy bueno, muy serio y sin errores. Para ser su debut con un WRC no se pudo hacer mejor”.
El director de Copi Sport valoró especialmente el que Lorenzo fuera capaz de obtener en el tramo de Santa Brígida un crono más bajo que el antiguo récord que Viera obtuvo con este mismo coche en 2010, temporada que cerró el ciclo de tres años del grancanario con el Focus. Según Capdevila, la razón de este buen rendimiento del ahora piloto de BP y la Red Ford de Canarias se debe a que su estilo de conducción le va como un guante al WRC. “No hay que olvidar que viene del karting y ahí el derrapar no tiene razón de ser. Otra cosa es que con el tiempo caiga en el error lógico de perder unas milésimas y ganar los aplausos. Cuando se está ganando con autoridad como lo hacía Alfonso está bien, pero eso Marco por ahora no lo tiene en el guión”, afirmó.
Por su parte, Marco Lorenzo no podía estar más satisfecho de esa segunda plaza que, al margen de cualquier otra valoración, lo coloca en muy buen lugar para empezar a cimentar el campeonato. Y es que sin Toñi Ponce, que en el mejor de los casos podría hacer un programa provincial dentro de Gran Canaria, el tinerfeño es hoy por hoy el favorito al título. “En principio se trataba de rodar y descubrir el Focus sin marcarnos un resultado, pero vimos la posibilidad de luchar por el segundo puesto y no la desaprovechamos. El coche es una maravilla y no tuvo el menor fallo. Ha sido gracias al trabajo de todo el equipo. Me han ayudado a sentirme muy cómodo, sin presión y arropado en todo momento, por lo que les doy las gracias y brindo el resultado”, declaró Lorenzo al departamento de comunicación del equipo al terminar el Rally Villa de Santa Brígida.
Tiempo de adaptación
Fue un día redondo para el equipo tinerfeño que colocó a sus dos primeros espadas en el podio y a Enrique Cruz y David Rivero como ganadores en la categoría R2. Sobre el papel de Alfonso Viera y Víctor Pérez, Capdevila cree que el rally satauteño fue sólo el primer capítulo de todos los que el campeón regional empleará a adaptarse al Porsche. “Él viene de un coche que lo hacía todo. Lo controles de tracción, los diferenciales, todo, hacían que pudiera salir de las curvas acelerando a fondo. Pero el 911 es, salvando las distancias, un Grupo N sin ayudas y con toda la potencia atrás, así que le llevará un tiempo adaptarse”.
Le cueste lo que le cueste, Alfonso Viera está muy contento con esa tercera posición. Una sensación que dijo que era equiparable a cuando ganaba con el Ford. “Estamos realmente satisfechos con el resultado. Lo importante era hacer kilómetros de cara al Rally Islas Canarias y además quedamos en la posición más lógica, tras los WRC. Aunque hay que hilar muy fino, puedo decir que nos divertimos mucho con el nuevo coche y creo que no me he equivocado con el cambio propuesto para esta temporada”, afirma el grancanario, que en los últimos compases del rally pareció fijarse como objetivo el segundo puesto que ocupaba Marco Lorenzo. Fueron los momentos de mayor tensión en la asistencia de Copi Sport. “Aquí no hay órdenes de equipo porque ni siquiera corren con las mismas marcas, pero hubo un momento en el que estaban muy cerca y sólo les dije que independientemente del orden, que acabaran segundo y tercero, pero que por favor no la fueran a liar…”, afirma Capdevila, que al final pudo celebrar el doblete de sus pilotos. Posiblemente el primero de unos cuantos.
