Pocas veces la concesión dependiente del Grupo Flick presenta varias novedades en un solo acto, pero esta vez la ocasión lo merecía. El pasado jueves 31 de marzo, sus instalaciones de la Avenida Escaleritas de la capital grancanaria desveló la imagen de dos modelos muy importantes para la marca. El primero, el nuevo SLK, el auténtico protagonista de la noche y el que mejor representa la nueva etapa creativa de Mercedes-Benz. El segundo, su modelo más característico y que estrena un pequeño rediseño, la Clase C.
Ricardo Ferrer, gerente de Flick Canarias, recordó durante su alocución que la Clase C es líder de ventas en su segmento desde su presentación en el año 1982, de ahí que en estos casi treinta años haya sido capaz de matricular más de 8,5 millones de unidades. Ferrer también repasó las principales novedades que introduce esta revisión de la Clase C, subrayando su dinámica imagen exterior, con unos paragolpes y grupos ópticos que le confieren un carácter más robusto, e interior, con un tablero de instrumentos más deportivo.
En cuanto las motorizaciones, dispone de cinco en gasolina y otros seis en diesel, todas ellas bajo el distintivo de BlueEfficiency, detalle que permite reducidir sus consumos hasta en un 31 por ciento. En esta contención también influye el nuevo cambio automático 7-G-Tronic.
El acto, al que se le quiso dar un cierto halo onírico, continuó presentando el SLK, un coche que según Flick Canarias, “eleva el listón de la conducción a cielo abierto a un nivel desconocido hasta ahora”. Esta tercera generación el SLK presenta como primicia mundial el Magic Sky Control, sistema que oscurece o aclara el techo panorámico con solo pulsar un botón.
El nuevo SLK dispone en su lanzamiento de tres motorizaciones, todos ellas con inyección directa de gasolina, cuyas potencias oscilan desde los 184 hasta los 306 CV. Como en la Clase C, todas estas motorizaciones son BlueEfficiency por lo han reducido su consumo de combustible hasta un 25 por ciento.
