Skoda amplía la familia del eléctrico Enyaq tanto en su variante SUV como Coupé con la nueva versión de acabado Laurin & Klement (L&K) asociada tradicionalmente a los modelos que que por estética y equipamiento ocupan el puesto más alto de la gama. En esta ocasión sus siglas no
representan exclusivamente mejoras puntuales en su diseño o en su dotación técnica, sino que vienen acompañadas con la entrada en escena de una nueva generación de propulsores más potentes y mejores rangos de autonomía.
Exteriormente es muy fácil de identificar. Incluye detalles exclusivos en Gris Platino en los parachoques que también son específicos, así como en el difusor y los retrovisores exteriores. Otros elementos
que distinguen a esta versión son los faldones laterales en color de la carrocería, mientras las ventanillas se enmarcan con un embellecedor en cromado. Este recurso de estilo es visible igualmente en la parrilla cerrada que de serie incorpora lo que en Skoda denominan Cristal Face, un panel transparente tras el cual se sitúan una serie de listones verticales iluminados por más de una centena de lamparitas LED y que ya fue introducido en la versión RS deportiva.
Y es que la firma checa no ha escatimado
en detalles a la hora de dotar a su versión estrella. De serie son los faros matriciales Full LED -los traseros son también Full LED- y las llantas específicas de 20 pulgadas -de 21 pulgadas en opción-. Con la llegada de la versión L&K, la marca ha decidido prescindir definitivamente de la coletilla ‘iV’ que acompañó en sus inicios al nombre de los modelos eléctricos.
A bordo, los cambios más significativos tienen más que ver con la introducción del nuevo software y como éste influye en la forma en la que el usuario interactúa con el vehículo. No obstante, no se han
olvidado de otorgar a su atmósfera una ambientación de clase alta dando la posibilidad al propietario de escoger entre dos acabados específicos -L&K Shell, con tapicería en cuero beige y L&K Black, obviamente en cuero negro-. Su perfil premium incluye asientos delanteros con ventilación, calefacción y calefacción con ventilación, además de función de masaje y ajuste eléctrico, todas ellas operativas a través del sistema de infoentretemiento.
La interfaz de usuario también evoluciona, implementando de paso el nuevo lenguaje de diseño y los colores de Skoda. Ahora viene con tres botones básicos que se muestran en tres esquinas 
de la pantalla integrando los ajustes del vehículo, las aplicaciones, y la pantalla de inicio. Además, se pueden activar hasta tres aplicaciones -como la navegación, el menú del teléfono móvil o el reproductor multimedia- a través de la barra situada en la parte inferior de la pantalla. Del mismo modo se ha rediseñado el panel de instrumentos y el Head-up Display que ofrecen ahora funciones mejoradas.
Esto en cuanto al estilo y los avances vinculados a la interacción con el vehículo, pero como adelantábamos el Skoda Enyaq L&K incluye también importantes mejoras técnicas con el estreno de un nuevo paquete de baterías y propulsión. La nueva generación del sistema proporciona una mayor potencia de 210 kW.
La oferta incluye dos opciones, el Enyaq L&K 85 de tracción trasera y una autonomía máxima de 570 kilómetros. Acelera de 0 a 100 km/h en 6,7 segundos, y la velocidad máxima ha aumentado hasta los 180 km/h. El Enyaq L&K 85x, por su parte, cuenta con tracción a las cuatro ruedas, acelera de 0 a 100 km/h en sólo 6,6 segundos, y su autonomía es de 550 kilómetros.
Con la actualización del software se introduce también una función de precalentamiento cuyo proceso se puede iniciar tanto de forma manual como automática basándose en los datos del sistema de navegación. Este nuevo procedimiento lleva la batería a una temperatura óptima antes de iniciar la carga. Ello ha permitido optimizar la curva de carga ofreciendo la capacidad pasar del 10% al 80% de la capacidad de la batería en menos de 30 minutos.
