Toñi Ponce logra su tercer 'Isla de Gran Canaria'

Con asfalto seco pero con un clima un poco más frío, Hoya de Pineda-Caideros prendió la mecha del asalto definitivo de este 50 Rally Isla de Gran Canaria. Y lo hacía con la duda de si los 8,8’’ de diferencia entre Toñi y Santi iban a ser o no suficientes. Ponce y González (Skoda Fabia WRC) mejoraban su registro de la primera pasada a pesar de cometer un par de fallos en sus 7,42 km, suficientes para que Concepción y Ghuneim (Porsche 911 GT3) le arrebataran el scratch por sólo tres décimas de segundo. Esta reacción del palmero abría la puerta a una posibilidad, ya que si las diferencias entre él y Toñi en el primer paso por la variante de Monte Pavón-Cueva Corcho se mantenían, el rally no estaba ni mucho menos decidido… [Ver resumen primera sección del 50 Rally Isla de Gran Canaria]

Ajenos al rompecabezas, José Mari Ponce y Carlos Larrodé (BMW M3) seguían disfrutando de un rally muy plácido para lo que nos tienen acostumbrados. Vicente Bolaños y Magnolia Herrera (Mitsubishi Lancer Evo IX) hacía tiempo que habían dado por buena su cuarta plaza que les daba un nuevo triunfo en Grupo N, así que cualquier cambio en la general estaría al margen del guión. Lo mismo sucedía con Ángel Marrero y Víctor Marrero (Honda Civic Type R), quintos sin aspavientos, un resultado que vale su peso en oro a efectos de la provisional del campeonato provincial.

Donde sí hubo cambios fue en la sexta posición. Germán Hernández e Israel Pereira (Honda Civic 1.6 VTi) seguían con su trayectoria ascendente a costa de José Luis Barrios y José de la Torre (Subaru Impreza), satisfechos con un nuevo podio en el grupo N. También Raúl Quesada y Pedro Domínguez (Renault Twingo) compraban la octava plaza, descartando el primer puesto de clase pero sumando al fin y al cabo un nuevo triunfo en el desierto Grupo R2. Tras ellos, Daniel Santana y Jorge Galván (Honda Civic) se la devolvían a Miguel Martin y José Luis Granado al recuperar la novena plaza por medio segundo.

El que se quedaba en este quinto tramo era el lanzaroteño Rubén Curbelo, cuyo Mitsubishi Lancer Evo VIII MR decía basta en mitad del recorrido. Todo lo contrario que Víctor Concepción y Toño Pérez, que recuperaban un ritmo a la altura del de Vicente Bolaños al solventar los problemas de turbo y volvían a puestos de cajón en Grupo N.

Otro bocado de Concepción

Se podía notar la tensión en la meta de Cueva Corcho. “Bien, bien…”, decía Toñi Ponce al ser preguntado sobre el tramo. Su mayor preocupación era el tiempo de Santi Concepción porque si el Porsche rompía el crono le podía complicar este final de carrera. El palmero fue capaz de rebajar el récord igualando así el parcial de scratch en tres contra tres, pero sólo mejoraba al Skoda Fabia WRC 3,5’’, insuficiente para poder depender de sí mismo. Y es que las matemáticas no cuadraban, ya que en la primera pasada por Cruz de Tejeda-Cueva Grande, Toñi le había sacado en la primera sección más de seis segundos.

Este statu quo se mantenía también en la tercera, cuarta y quinta posición. El armisticio que parecía haberse pactado al cierre de la primera sección hacía que nadie se moviera de la foto, con José Mari Ponce, Vicente Bolaños y Ángel Marrero por este orden. Arrastrando aún los problemas de embrague que mojaron la pólvora de su Impreza desde el viernes, José Luis Barrios siguió perdiendo tiempo respecto a Germán Hernández, que hacía buena su remontada. Hasta Raúl Quesada se acercaba a la estela del Subaru desde la octava posición.

Décimo y con el punto de mira en la novena de Miguel Martín, Víctor Concepción seguía aprovechando que su Evo IX volvía a estar en perfecto estado de revista para seguir escalando plazas a costa de Daniel Santana, que iba haciendo la goma en función de lo mejor o peor que se adaptara el tramo a su modesto Honda Civic.

Sin sobresaltos

Toñi Ponce sabía que se jugaba el rally con uno de los pilotos más incisivos de los que permanecen en activo en Canarias, así que cuando se acabo la cuenta regresiva en la salida de Cruz de Tejeda fue a por todas. “En diez años que Rubén lleva conmigo, nunca me había dicho que estamos locos. Hoy lo ha hecho”. El de Skoda lograba su quinto scratch con 4,2’’ respecto a Concepción y, como premio, llevarse el 50 Rally Isla de Gran Canaria, una edición especial para la prueba que está más estrechamente ligada al apellido Ponce.

“Le dedico a mi padre esta victoria en la cincuenta edición”, declaró el piloto de Skoda al llegar a la meta, que así inscribía por decimotercera vez el apellido Ponce en el palmarés de ganadores del Rally Isla de Gran Canaria. Es el tercer triunfo en su cuenta particular junto a los de 2004 y 2007, dos campañas en las que curiosamente fue campeón regional y rompiendo el empate que mantenía con el pionero de la saga (1957 y 1960).

“Ha hecho un rally fabuloso. Ha ido muy rápido y nosotros hemos hecho una carrera de menos a más”, resumió el piloto palmero que fue capaz de mejorar el antiguo récord de este tramo. Sus tres scratch y el nivel mostrado a pesar de llevar un año y siete meses sin competir dejaron satisfecho a Concepción, un piloto que nos da en la nariz que va a hacer más de una y de dos pruebas en lo que queda de temporada. Tiempo al tiempo.

Acostumbrados a jugarse los rallys a todo o nada en un solo tramo, José Mari Ponce y Carlos Larrodé tuvieron una de las carreras más tranquilas que se le recuerdan. Y eso que los problemas que les dio el acelerador de su BMW M3 en la súper especial del viernes les puso algo cuesta arriba el objetivo de lograr su decimocuarto podio en esta prueba, ya en el segundo tramo pusieron orden y se anclaron a la tercera posición. Desde 2004 los dos hermanos Ponce no coincidían en el podio final, aunque aquella temporada Toñi conducía el Skoda Octavia Kit Car y, José Mari, el Volkswagen Polo Súper 1.600.

La estadística también es muy generosa con Vicente Bolaños y Magnolia Herrera. No ha habido rally e incluso subida en el que hayan participado con el Mitsubishi Lancer Evo IX y no se hayan llevado el grupo N y aquí no rompieron esa tendencia. Les ayudó la sucesión de averías y problemas que asoló al resto de rivales en esta categoría, pero aún con su coche en condiciones, Víctor Concepción estuvo a su altura cuando el grancanario ya había levantado el pie del acelerador.

Ángel Marrero y Víctor Marrero sellaron la quinta posición confirmando su perfecta sintonía con el Honda Civic Type R de Juan Armas, un coche que estrenó hace menos de tres meses y con el que ha vuelto a posiciones de cabeza en la clasificación del provincial de Las Palmas de rallys. Estuvo en el lugar en el que se le esperaba, cerca de los mejores Grupo N y por delante del grupo de coches y pilotos que se iban a jugar la Clase 6. Entre ellos, el mejor fue el equipo formado por Germán Hernández e Israel Pereira. Los de Honda bien podrían haber hecho el petate y haber aprovechado el puente después de perder 17’’ en el tramo de tierra y asfalto que abrió el rally el viernes, pero a pesar de que en sólo seis especiales poco se podía hacer, se marcaron como meta remontar y pasaron de la posición 48 a la sexta. Impresionante.

Y si Hernández fue el gran damnificado del tramo de tierra, uno de los destacados, José Luis Barrios y José de la Torre fueron precisamente los que acabaron cediendo al empuje de los de Honda. A pesar de quedar a casi minuto y medio del ganador del grupo N, su segundo puesto en esta categoría sigue valiéndole para continuar como el equipo a batir en el regional, su verdadero objetivo esta temporada.

Lo mismo se puede decir de Raúl Quesada y Pedro Domínguez. Los del Renaut Twingo no fallaron en este rally en el que estuvieron solos en el grupo R2 ante la ausencia de Enrique Cruz y aunque perdieron la batalla de clase con Hernández, dejaron constancia de su calidad con esa octava plaza absoluta. Tras ellos, Víctor Concepción y Toño Pérez no tuvieron tiempo para más en esta sección que pudieron hacer al completo con el turbo de su Lancer Evo IX en plenas facultades, aunque sí pudieron alcanzar el tercer puesto de su categoría, el Grupo N.

Después de estar pasándose y repasándose durante buena parte del rally, Miguel Martín y José Luis Granado acabaron imponiéndose por sólo 1,1’’ a los jóvenes Daniel Santana y Jorge Galván. Los de Honda siguen ganando puntos como revelación de la temporada, por lo menos en la isla de Gran Canaria, y en esta tercera cita del provincial se llevaron el consuelo de volver a ganar el Trofeo de Promoción. Fran Suárez y Javier Santana lo intentaron, pero les pesó la falta de ritmo de la primera sección y terminaron a 2,5’’ como duodécimos clasificados.

Ya a más de un minuto de este trío que se jugó la décima posición, Juan Betancor y Juan Carlos Díaz (Toyota Corolla Twin Cam) se rehicieron tras un complicado principio de rally superando al segundo clasificado de Promoción, el Renault Mégane de Francisco López y Esteban Santana. A cuatro segundos de ellos, los batalladores Heriberto Godoy y Yeray Díaz (Peugeot 206) fueron decimoquintos.

A continuación, desde la decimosexta plaza, se abría el melón del otro trofeo, el Toyota ENMA. Aquí no hubo otro jefe que Ayoze Benítez y Joel Benítez, líder desde el viernes y acumulando una ventaja superior al medio minuto respecto a Domingo Ramos y Daniel Sosa, los segundos clasificados. Raúl Fernández y José Vega cerraron las tres primeras posiciones de esta copa superando en la general absoluta a David Ortega-Alejandro Falcón (Lancia Delta HF) y a Bernardino Guerra y Yeray Mújica (Hyundai Getz).