Cuando apenas faltan unas semanas para el inicio de la comercialización en Canarias del recién estrenado Coupé, Mini se aventura en un nuevo proyecto, el sexto de su historia reciente, denominado Roadster donde se reinterpreta el estilo inconfundible de aquel para presentar el primer descapotable biplaza de la marca. Su longitud, anchura y altura (3,73 metros x 1,68 x 1,39) así como una distancia entre ejes de 2,46 metros y su centro de gravedad extremadamente bajo, componen el esquema principal de un vehículo con clara vocación deportiva donde los cortos voladizos, el parabrisas algo más inclinado y el diseño de tres volúmenes caracterizan la estética exterior que presenta el nuevo Roadster. Eso y por supuesto la capota en material textil que inspira la aparición de esta nueva versión y que se puede abrir y cerrar de forma manual o semiautomática de manera muy sencilla y rápida. Al abrirla, la capota se pliega detrás de los asientos con su capa exterior en la parte superior por lo que no es necesaria una funda adicional para cubrirla. Las barras antivuelco de acero inoxidable y el marco reforzado del parabrisas garantizan la seguridad de sus ocupantes en caso de accidente.
Además, su condición de descapotable trae aparejado la modificación de una serie de parámetros correspondientes al comportamiento de la carrocería ahora con una mayor rigidez torsional y que junto a los umbrales laterales más sólidos, contribuyen a aumentar la solidez del habitáculo.
En términos de dinámica la escasa incidencia de la capota y las modificaciones del chasis contribuyen a una redistribución del peso que beneficia la tracción y un comportamiento más ágil y preciso del vehículo. Para optimizar en este caso la aerodinámica el Mini Roadster presenta una solución en forma de alerón que se activa automáticamente cuando el vehículo supera los 80 km/h. Este también puede activarse manualmente mediante una tecla situada en el panel de mando ejerciendo una fuerza descendente de unos 40 kilogramos cuando el coche alcanza la máxima velocidad.
Carácter personalizable
Para garantizar su carácter distintivo el nuevo Roadster se puede elegir con dos pinturas normales y seis metalizadas. La capota es de color negro y se puede recurrir a las franjas deportivas, disponibles en tres tonalidades, para realzar su carácter personalizable. Además incorpora de serie llantas de aleación ligera que según el modelo pueden ser de 15, 16 ó 17 pulgadas.
En el interior, la variedad de acabados y tapicerías acrecienta su valor individualista y su condición como biplaza. Una característica que contribuye a mejorar el volumen existente en el maletero que es de 240 litros, existiendo un paso entre este y el habitáculo para aumentar las posibilidades del coche. La consola central de grandes dimensiones y el cuentarrevoluciones posicionado justo detrás del volante simplemente son un distintivo más de una ambientación que presenta además amplios espacios en las puertas y detrás de los asientos para albergar todo tipo de objetos así como tres portavasos.
El carácter personalizable del coche se realza mediante un equipamiento de serie muy completo que incluye, entre otros, climatizador automático, dirección asistida en función de la velocidad, Park Distance Control, sistema audio Radio MINI CD compatible con MP3 y conexión AUX-In. Con el fin de aumentar el nivel de confort se puede recurrir a una serie de equipos opcionales tales como faros xenón, luces autoadaptables, faros de color negro, sistema de acceso confort y Always Open Timer. Adicionalmente pueden aprovecharse en el MINI Roadster las innovadoras funciones de información y entretenimiento de MINI Connected.
Cuatro motores: Tres gasolina y un diesel
La oferta de motorizaciones se compone de tres versiones en gasolina y una diesel, todas con cuatro cilindros y sobrealimentación. Como ocurre en el Coupé, el rango de potencia de estos motores empieza con los 122 CV del MINI Cooper Roadster, pasa por los 143 CV del MINI Cooper SD Roadster (diesel) y los 184 CV del MINI Cooper S Roadster, y llega hasta los 211 CV del MINI John Cooper Works Roadster, el modelo más deportivo de la gama.