La primera de las dos citas americanas del WRC junto a Argentina abre un turno de seis rallys consecutivos sobre tierra, de manera que este fin de semana se podrá tener una imagen bastante nítida de cuáles son los equipos más en forma esta temporada. Sin duda alguna, uno de ellos será el formado por Sébastien Loeb y Daniel Elena, que llevan desde 2006 imbatidos en México.
Con esa estadística apabullante se entiende que el ocho veces campeón del mundo sea un auténtico ídolo allí. El Mundial de Rallys se vive con pasión entre los aficionados, por ello la prueba es una de las más multitudinarias del calendario. “Es un rally muy agradable, hace sol, las especiales son divertidas y se siente la pasión de los espectadores”, comenta el alsaciano, que siente debilidad por la espectacular súper especial nocturna del jueves con el que se abre la carrera. “Se celebra en las calles de Guanajuato y es uno de los platos fuertes de la temporada. Siempre es agradable empezar el rally con una especial trazada en las calles subterráneas de la ciudad minera”.
Siete de los 24 tramos son súper especiales y aunque representan sólo el tres por ciento del kilometraje total, la historia dice que en caso de que la lucha sea muy cerrada, acaban teniendo un papel importante. “Prefiero las especiales tradicionales sobre tierra. En México, normalmente las carreteras de montaña son anchas y rápidas. Hay también algunas zonas sinuosas y estrechas en las que hay que tener mucho cuidado, pero en general es una prueba divertida”, afirma el oficial de Citroën.
Su principal rival será, muy posiblemente, Jari-Matti Latvala (Ford Fiesta RS WRC), que tras vencer en Suecia ha preparado este rally con unos test de cerca de 500 kilómetros en la localidad andaluza de Málaga. “El primer día de pruebas estuvo tan cerca de las condiciones de México como nunca habíamos encontrado en Europa en esta época del año. La superficie era igual a la mexicana y la temperatura de 24º era ideal para hacer test. Conduje en condiciones de carrera en tres sectores de 54 km, de forma ininterrumpida, lo que fue una preparación perfecta para la larga especial de 51 km que nos espera en la etapa final de México”. Latvala se refiere a ‘Guanajuatito’, un mega tramo de 54,3 kilómetros que será el antepenúltimo del rally y que puede dejar en papel mojado todo lo que haya sucedido de ahí hacia atrás.
Para el finlandés de Ford las pistas de México “no son las más duras de la temporada”, pero esconden trampas como los pasos de agua de hormigón que atraviesan las calzadas y que pueden acarrear pinchazos o sorpresas aún peores “si no aciertas a cruzarlas debidamente”. “En general, México es un rally en el que hay que procurar mantener el coche en las trazadas limpias, pero su principal característica es la altitud sobre el nivel del mar, ya que eso significa que disponemos de menos potencia de la habitual. Si cometes un error y te sales de la trazada limpia, la pérdida de tiempo es mayor porque la aceleración no es tan rápida como la normal. Y también implica que es más fácil llegar a las curvas con la marcha equivocada. Lo que se podría identificar en los reconocimientos con cuarta velocidad, podría ser simplemente una tercera en el rally”, explica.
Mikko Hirvonen (Citroën DS3 WRC) ha sufrido en estas últimas temporadas la imbatibilidad de Loeb en este rally. Segundo el pasado año como piloto Ford, el ahora oficial Citroën coincide con su compatriota en el hándicap de la altura. “La zona donde se disputa la prueba está a una altitud de 2000 metros y eso rebaja sensiblemente la potencia de los motores. También pinché alguna vez, aunque esta no es la prueba más exigente para los neumáticos”, comenta el subcampeón del mundo. “Estoy entusiasmado con la idea de disputar este rally con Citroën, después de los buenos resultados que han conseguido en México. También estoy contento de cómo han ido las pruebas sobre tierra, me he sentido muy bien con el coche”.
Petter Solberg no pudo preparar este rally todo lo intensamente que esperaba en Andalucía. Una gripe lo dejó tocado, pero ya está repuesto y listo para el tercer asalto de la temporada. Está confiado porque las sensaciones en Málaga y en otros test previos que hizo en Francia sobre tierra fueron fantásticas.
“Empecé con el mismo montaje de cubiertas que Jari-Matti y realicé unos cuantos cambios para adaptarlo a mi estilo. A partir de ahí continué tranquilamente y estoy contento con lo que he conseguido. México es el primer rally de tierra de la temporada y ahora el campeonato se intensifica sobre esa superficie. La altitud afecta tu forma de conducir, al haber menos potencia es necesario atacar un poco más fuerte y mantener la velocidad. Tengo un buen historial en México y otro gran resultado completaría un fuerte inicio de temporada”.
