La nueva familia Insignia se completará en breve con el Opel Insignia Country Tourer que a diferencia de su hermano el Sports Tourer, presenta una mayor distancia libre al suelo (20 mm). Su carácter polivalente se define a través de unas protecciones en los bajos de la carrocería delante y detrás en color antracita, combinados con marcados pasos de rueda y revestimiento más bajo en la carrocería, todo ello complementado con una doble salida del escape.
El nuevo miembro de la familia Insignia presenta como gran novedad el sistema de tracción 4x4 incorpora un embrague que funciona con el principio Haldex y un diferencial autoblocante trasero controlado electrónicamente (eLSD). Su funcionamiento permite adaptar la tracción a las condiciones de la superficie por la que se circula distribuyendo el par motor entre el 0 y 100% entre el eje delantero y trasero, así como entre ambas ruedas traseras.
Los sensores del sistema 4x4 suministran constantemente a cada uno de los módulos de control información sobre la tasa de inclinación, la aceleración, el ángulo de la dirección, la velocidad de las ruedas, la posición del pedal del acelerador, el régimen de giro del motor y el par, y la distribución de potencia entre los ejes delantero y trasero se adapta constantemente para actuar con anticipación a las circunstancias de conducción. En condiciones normales el sistema regresa automáticamente a tracción delantera para reducir las pérdidas por fricción y ahorrar combustible.
En España estará unido a los motores turbo diésel de inyección directa, el 2.0 CDTI de 163 CV y 350 Nm de par (se puede incrementar hasta 380 Nm con la función overboost), y el 2.0 BiTurbo CDTI con un par máximo de 400 Nm. Este último desarrolla una potencia de 195 CV.
El motor 2.0 CDTI estará disponible asociado a una caja de cambios manual de seis velocidades, mientras que el más potente BiTurbo vendrá de serie con una caja de cambios automática de seis velocidades.