Enrique Cruz y Ariday Bonilla han tenido que bajarse del 39 Rally Isla de Tenerife en los primeros compases de esta penúltima prueba del campeonato autonómico canario. Un pequeño golpe en el transcurso del primer tramo de ‘La Guancha’ (13,1 km) hirió el frontal derecho del Porsche 997 GT3 y, tras cruzar la meta con el quinto mejor registro, tuvieron que volver a su asistencia una vez comprobaron que habían roto uno de los radiadores.
"De los años que llevo compitiendo esto ha sido lo más duro. Ha sido un palo. Tenía muchas esperanzas en este rally, lo habíamos preparado de maravilla y la pena es que ha sido por un error mío. Nos salimos en la curva más tonta de todo el rally, en una zona muy estrecha en la que el coche dio un bote, hizo tope la suspensión y le di un golpe por debajo hasta que nos tuvimos que retirar", explicó el tinerfeño en los micrófonos de Fórmula Motor.
En casi dos años compitiendo con el Porsche, el piloto de DISA no había tenido ni un solo percance ni en montaña (2012 y 2013) ni en rallies (2013). Sin duda, sus ganas de demostrar el buen estado de forma que atraviesa y la necesidad de salir al máximo desde el primer kilómetro por el increíble nivel de este rally le han jugado una mala pasada al joven tinerfeño. Es su primer abandono desde el Rally de Ferrol de 2010, entonces por avería en su Ford Fiesta R2.
Una lección más para el bravo piloto de DISA que ahora tendrá que centrarse en la consecución de su segundo título autonómico de montaña e intentar desquitarse en rallies con el Isla de Lanzarote, última prueba de la temporada en esta modalidad.
Foto: DISA