La historia de ‘Cohete’ Suárez es la de tantos y tantos jóvenes pilotos que llevan años abriéndose paso a base de sacrificio en el deporte del automovilismo. Un deporte caro, a veces ingrato, que exige que familias enteras tengan que invertir a fondo perdido en busca de que el chaval algún día esté en el sitio justo en el momento adecuado y con su talento llame la atención de algún equipo.
El ACSM Rally Team ha sido un buen trampolín para Suárez en estas últimas temporadas, pero una vez el objetivo del título del JWRC –cuyo premio es hacer un programa con M-Sport al volante de un Fiesta R5– se ha quedado ya fuera de su alcance, ‘Cohete’ necesita del apoyo de una marca. Las mismas que la RFEdA quiere que vuelvan a un Campeonato de España de Rallies de Asfalto que posiblemente sea su destino en 2014.
“Es posible que vuelva al nacional o que dé un paso aún más atrás y no continúe. No lo sé. Mi futuro está un poco negro porque las ayudas son mínimas y considero que estoy en un momento en el que tengo que empezar a recibirlas”, ha declarado el piloto asturiano en Kilómetro 103, el programa de motor de Radio Canarias.
“Tengo el apoyo de la empresa familiar, de ACSM, del RACC y de otras firmas, pero está siendo el momento de obtener alguna ayuda federativa o de alguna marca y, por lo menos, espero poder correr el nacional el año que viene”. El objetivo de ‘Cohete’ no es fácil, pero tampoco le falta razón al reclamar esa atención en un momento en el que la comparación con nuestros vecinos franceses escuece.
En medio de todas esas dudas la victoria de este pasado sábado en el Rally Comunidad de Madrid con un vetusto ya Mitsubishi Lancer Evo IX con especificaciones N Plus tiene aún más mérito y le da un halo reivindicativo. “El rally fue bueno y ganamos”, resume el subcampeón del mundo Junior de 2012. El hecho de no haber podido repetir este año no le importa, de hecho en Madrid considera que no hubo espina que quitar. “No considero que haya tenido ninguna herida. Son lances de carrera”, afirma en referencia a su accidentado final de temporada. “No me ha fastidiado no quedar subcampeón porque ya lo fui el año pasado y mi objetivo era ganar. El subtítulo no tiene más valor que eso, que conseguirlo. Para contarlo a los amigos está bien, pero de cara a ayudas no sirve para nada”.
Visto que con un N Plus es capaz de mantener a raya a los R4, quizá repetir con un Mitsubishi de esa categoría en 2014 sería una buena opción. Pero ante las dudas sobre su futuro, el asturiano asegura que no tiene manías. Lo que quiere es correr. “Para ser sincero, no tengo preferencias a la hora de correr con uno u otro coche. Voy a ver qué deparan estas semanas y estos meses antes de que empiece la próxima temporada y esperar que aparezca un apoyo extraordinario y correr el CERA por lo menos”.
Foto: FIA JWRC