Tras el abandono de Enrique Cruz y Ariday Bonilla cuando mandaban en la general del 25 Rally Villa de Adeje a causa de un palier cuando iban camino de la segunda sección, la tercera –primera de la etapa del sábado– también se ha cobrado dos bajas importantísimas entre los participantes canarios.
El primero en caer ha sido el Porsche 997 GT3 de Yeray Lemes y Rogelio Peñate, que sufrían un trompo al comienzo del TC8 con tan mala fortuna que el tren trasero quedó encallado en la tierra. Al quedarse sin tracción ninguna, no pudieron sacarlo de ahí sin la ayuda del público, que estaba muy lejos de la zona, acabaron abandonando a pesar de que el coche está intacto.
Lemes marchaba segundo de la provisional del Campeonato de España y tercero del autonómico después de adjudicarse el scratch en el séptimo tramo recortando distancias a Fuster. En el momento del abandono estaba a 4,5’’ de su compañero de equipo en Auto-Laca.
Luis Monzón y José Carlos Déniz mandaban en el autonómico y en esa hipotética clasificación global con una holgura enorme. Sin bajar el ritmo en ningún momento, los satauteños acumulaban tras ocho tramos más de un minuto de margen sobre Armide Martín-Pedro Domínguez, pero en el noveno tramo, terminando la tercera sección, su MINI John Cooper Works empezó a sufrir un repentino problema en el sistema de alimentación y tuvieron que abandonar.
Otros líderes, en este caso de la Copa de España de R2 y también en la de Vehículos FIA, Esteban Vallín y Borja Odriozola, también han tenido que abandonar por avería en su Opel Adam R2. Con ello, José Luis Peláez y Diego Sanjuán se sitúan al frente con su Peugeot 208 R2.