Para sorpresa de muchos, Meeke se ha erigido en el protagonista inesperado de este Rallye de Argentina. A pesar de no haber comenzado la temporada de la mejor manera posible, el británico de Citroën se está reencontrando consimo mismo en los caminos de montaña de la provincia de Córoba, donde marcha líder destacado en estos momentos, con una cómoda ventaja de un minuto sobre su compañero de equipo, Mads Ostberg.
El noruego (afectado por un inoportuno resfriado) se vio beneficiado en la recta final de la jornada por los problemas en la caja de cambios que afectaron a Latvala al término de una etapa muy turbulenta para todo el equipo Volkswagen: Mikkelsen pinchó en el primer tramo del día, Ogier se quedó tirado desde el principio con el motor en tres cilindros... En definitiva, una sucesión de fatalidades que ha dejado al equipo de Wolfsburgo sin opciones de reeditar su doblete del año pasado en Argentina.
Mientras tanto, el español Dani Sordo se encuentra en cuarto lugar de la general, a medio minuto de Latvala, después de una primera jornada en la que logró superar un problema en la dirección asistida para mantenerse en la pugna por el podio.
Por el contrario, su compañero de equipo, Thierry Neuville, comenzó la jornada con el pie izquierdo, pinchando nada más arrancar. Aunque después consiguió escalar posiciones, su desventaja respecto al líder supera ya la franja de los cinco minutos.
Al-Kuwari, noveno en la clasificación, a espaldas de Neuville y Al Qassimi, terminó la etapa como líder de la categoría WRC2. El piloto árabe se vio beneficiado por la penalización de tres minutos en la que incurrió Protasov, quien llegó a la asistencia con el puente trasero destrozado.