Sexta etapa del Dakar entre Jujuy y Uyuni y el panorama sigue siendo el mismo. Por un lado, continúa el dominio Peugeot, cuyos 2008 DKR copan las tres primeras posiciones y acumulan ya cuatro victorias de etapa. Por otro, Sébastien Loeb ha dejado de ser un debutante con fortuna capaz de sacar partido a las primeras etapas que mejor se adaptaban a su perfil y experiencia para erigirse en un verdadero candidato al triunfo.
El alsaciano ha conseguido en la meta de Uyuni, ya en territorio boliviano, su tercera victoria parcial de este Dakar 2016. Y ello a pesar de que su recorrido ya incluía unas primeras dosis de navegación y de que hoy pilotos y copilotos han tenido que hacer frente a los efectos de la altura, ya que por primera vez en la historia de esta carrera se han alcanzado los 4.600 metros sobre el nivel del mar. Con esta nueva demostración de poderío, Loeb ya acumula una ventaja cercana a los ocho minutos sobre su compañero Stéphane Peterhanel y más de trece sobre Carlos Sainz, que ya es tercero.
“Hemos perdido un poco de tiempo en la última parte con respecto a Carlos, que ha debido de rodar a tope en las pistas sinuosas. Confiaba mucho en el trabajo de Daniel (Elena) pues he visto cómo preparaba sus libros de ruta y hace un trabajo fantástico. Ayer fui un poco cauto con la mecánica pero hoy en cambio me he dejado llevar más y el coche ha respondido de maravilla. Mañana probablemente nos toque abrir la pista en una ruta de 520 kilómetros, así que tendremos que tener mucho cuidado con la navegación… Será también un momento importante”, ha dicho el ex de Citroën, cuya actitud no es la de un debutante que viene sólo a acumular experiencia.
No hay que quitarle mérito al papel de los Peugeot 2008 DKR. Para muchos esta etapa maratón iba a ser la verdadera prueba de fuego de los coches franceses y la han superado con nota. Nasser Al-Attiyah reconoció en meta que ha atacado como nunca lo ha hecho desde que compite en el Dakar y que, a pesar de ello, ha perdido tres minutos. Y en la general ya está a catorce... “¡Es increíble! Nunca había atacado tanto como ayer y hoy. Hemos rodado a más del 100%. No tenemos ninguna opción frente a los Peugeot y es imposible ganarles salvo que pinchen. Hay que felicitarles porque hacer dos jornadas maratón sin experimentar el menor problema es impresionante. Yo, en cambio, he perdido tres minutos pese a darlo todo… Por mucho que ataque como un loco es imposible alcanzarlos. Son rápidos en todos los terrenos mientras que nuestro Mini no ha evolucionado”, ha dicho el actual campeón.
Carlos Sainz, por su parte, estaba satisfecho de las sensaciones que le ha dejado esta nueva etapa: “Estoy muy contento por el equipo con el resultado, todo funciona muy bien y sin ningún imprevisto. El coche va perfecto, al principio de la etapa había un cauce de un río seco con muchas piedras y no hemos querido arriesgar a tener un pinchazo al llevar tan solo una rueda de repuesto. Luego hemos corrido un poco más hasta el final para terminar a 22 segundos de Loeb”.
La etapa del viernes 8 de enero será la más larga del Dakar con 723 kilómetros de enlace y 542 de especial. Y no se trata de la única dificultad que se encontraran los participantes, ya que otra vez la altitud será otro punto complicado al disputarse entre los 3.500 y 4.200 metros.
