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Nuevo R8: Audi a la enésima potencia

  • Dispone de start/stop y 'cylinder on demand' para reducir consumo
  • El nuevo modo Performance es de serie en el V10 Plus

Ya está en Canarias el nuevo Audi R8, un súper deportivo que aunque conserva toda su idiosincrasia ha sido hecho desde cero en esta evolución 2.0. Su línea es ahora más futurista aún y la nueva versión tope de gama lleva la experiencia de conducción a niveles superiores, en parte, gracias una propuesta de motores que tiene como guinda un V10 de 610 CV de potencia.

Más próximo a los prototipos de competición de la marca de los cuatro aros que ningún otro modelo producido en serie, ha sido desarrollado con la participación activa de especialistas e ingenieros de ese ala deportiva de Audi. Los propios pilotos de la casa han colaborado a la hora de hacer del nuevo R8 una máquina aún más placentera y sorprendente de conducir. 

Ese V10 atmosférico es en buena medida la piedra angular de todo lo que representa esta nueva generación del R8. Primero porque en él se vuelca buena parte de esa experiencia en los circuitos más exigentes del mundo; y segundo, porque en su versión plus establece unos valores referencia de aceleración: de 0 a 100 en 3,2 segundos; hasta 200 en 9,9 segundos y una punta de velocidad de 330 km/h. Este 5.2 FSI se caracteriza por su sonido y su capacidad para subir de revoluciones hasta las 6.500 por minuto. En su versión estándar tiene 540 CV y 540 Nm de par máximo. 

De nuevo es ese bagaje de la marca de Ingolstadt en las carreras de resistencia el que hace posible que prestaciones y eficiencia puedan convivir en el R8. La inyección indirecta adicional que complementa la directa, el sistema Cylinder on Demand y el start-stop permiten reducir los consumos en un 10 por ciento. A más de 55 km/h el cambio automático S tronic de siete velocidades desacopla los dos embragues cuando se levante el pie del acelerador para ahorrar también gasolina. 

Otra ley que impera en la alta competición es la de la ligereza, por eso su carrocería, que emplea plástico reforzado con fibra de carbono, nuevas aleaciones y, en la práctica totalidad de su estructura, aluminio, pesa tan sólo 200 kg. En su totalidad, el nuevo R8 es un 15 por ciento más ligero, pero su rigidez torsional es un 40 por ciento superior. 

Una muestra clara de esa proximidad a un vehículo de carreras es que el cambio secuencial tiene un control de salida para aprovechar al máximo su capacidad de aceleración. Son igualmente soluciones técnicas propias de la alta competición la tracción total quattro y el cárter en seco que mejora el suministro de aceite incluso al tomar una curva a alta velocidad. 

Además de los nuevos motores, son pieza fundamental en esa experiencia de conducción más deportiva los nuevos brazos transversales dobles hechos en aluminio, la dirección dinámica y, ya como equipamiento opcional, la suspensión variable adaptativa Audi Magnetic Ride. Muchos de estos parámetros están conectados con el selector de perfiles de conducción Audi Drive Select con un nuevo modo ‘Performance’ que es de serie en el V10 Plus.

Evolución en su personalidad

Aunque el R8 es totalmente nuevo, su diseño da continuidad al concepto original modernizando algunos pequeños detalles. En cotas varía su anchura, ahora 4 centímetros superior, y la parrilla Singleframe es más plana, igual que las ópticas delanteras. Las luces diurnas crean el efecto visual de ser una prolongación de las nuevas tomas de aire y esos grupos ópticos, tanto los delanteros como los traseros, incorporan los intermitentes dinámicos. Las dos salidas de escape tienen un diseño trapezoidal y la luna trasera ofrece una visión clara del vano motor, que además está iluminado. El R8 está equipado con un spoiler trasero retráctil y eléctrico, mientras el R8 V10 plus monta un alerón fijo fabricado en plástico reforzado con fibra de carbono.

Este nuevo sistema de iluminación se sirve de un módulo láser en cada faro. Cada uno de ellos está integrado por cuatro diodos láser de alta potencia que generan una luz que mejora la visión y ayuda a prevenir la fatiga visual. Un sistema de sensores basado en la cámara inteligente detecta otros usuarios de la vía y ajusta el patrón de luz para excluirlos y así evitar su deslumbramiento.

En el interior lo más novedoso es la incorporación del ‘virtual cockpit’ de Audi, los nuevos mandos satélite en el volante multifunción para el botón de arranque, el Audi drive select o ese modo Performance que es de serie en el R8 V10 Plus. Activándolo en esa gran pantalla a todo color aparece también datos sólo relevantes en la práctica de una conducción deportiva como la aceleración, deceleración, fuerzas laterales, potencia y par.

Si quieren ver en acción el nuevo Audi R8, les recomendamos que visiten nuestro canal de YouTube. 

 

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