La marca británica recupera para la Classic 500 la gama de colores que en los años 50 triunfaron entre los usuarios y reunidos bajo el nombre de la localidad inglesa donde nació la marca hace más de 100 años.
Los tonos escogidos son el verde, rojo y azul entonces aplicados a modelos como Crusader, Clipper, Bullet y Meteor Minor. Sesenta años después, Royal Enfield vuelve a recuperar aquellos llamativos colores pastel en los mismos tonos originales, pero con las tecnologías de pintura y acabados más actuales, en esta serie especial.
Sin duda, el color que tuvo mejor aceptación fue el Rojo “Chinese Red” que utilizaron los modelos deportivos de la marca y, en especial, las máquinas que se exportaron a Estados Unidos bajo la marca “Indian”, así como el modelo Furia producido entre 1959 y 1961. Otro color que tuvo mucho éxito fue el “Wedgewood blue” un azul muy suave, casi cián, que se empleó en la Crusader, Bullet y las grandes bicilíndricas de 1958. Por último, el “Surf Green” es un verde oscuro utilizado en las motocicletas Ensign II y III con motor 2T y 150 cc así como en la completamente nueva Crusader 250 que se estrenó en 1957.
Los tres colores se combinan con el negro brillo empleado en el bastidor, guardabarros y tapas laterales, y los cromados que se lucen en el cerquillo del faro, intermitentes, amortiguadores, llantas, manillar, retrovisores y tubo de escape. El motor se entrega completamente pulido en aluminio al igual que las botellas de la horquilla.