Lo ha vuelto a hacer. Iván Ares ha ratificado su idilio con la noche tinerfeña, anotándose el mejor tiempo, a los mandos de su Hyundai i20 R5, en las dos especiales que han coronado la primera jornada del Rallye Villa de Adeje. Un envite por parte del gallego que, del mismo modo que el pasado año, le ha permitido culminar la etapa como líder, delante de José Antonio Suárez, cuya desventaja respecto al rival con el que dirimió el triunfo el pasado año se cifra en tan solo 5 segundos, una vez computados los seis primeros tramos.
Surhayen Pernía también ha estado bregándose con sus compañeros de marca, llegando a situarse como líder provisional después de la segunda cronometrada. Pero, al contrario de lo que ha ocurrido con Ares, el bucle nocturno se le ha atragantado al cántabro, que ha cedido casi medio minuto en tan solo tres tramos, pasando a disputarse ahora el tercer puesto con el Porsche de Enrique Cruz.
El tinerfeño encabeza el pelotón de pilotos canarios, seguido por su paisano Adrián García, que ha acabado la jornada quinto de la general, precediendo a los Suzuki Swift R+ de Joan Vinyes, Javier Pardo y Manuel Mesa, dominadores indiscutibles entre los N5.
Lamentablemente, Yeray Lemes ha sido descalificado al haber salido con casi un minuto de retraso a un tramo por culpa de un fallo del embrague.
Alberto Monarri también ha sufrido problemas a las primeras de cambio, en su caso a consecuencia de un manguito del turbo que le ha obligado a completar el primer bucle rodando prácticamente a vela con su Abarth 124 Rallye. La asistencia del equipo SMC ha solucionado la avería esta tarde, pero, para entonces, el madrileño ha cedido ya un mundo, viéndose relegado a la undécima posición entre los Dos Ruedas Motrices (2RM), categoría donde se encuadra también Peugeot 208 con el que Sergio Fuentes está liderando la R2.