Hyundai persevera en su afán de imprimir a su gama eléctrica mayor personalidad. En esta ocasión, mediante un recurso marca de la casa como es la deportividad. El Kona Eléctrico es el primer modelo de la familia EV en adoptar el acabado N Line de diseño más dinámico.
El nuevo acabado incluye parachoques exclusivos tanto en la parte delantera como en la trasera, faldones laterales y un juego de llantas específicas en medida de 19 pulgadas. Se incluye también el emblema N Line para identificar de qué versión se trata.
En el habitáculo, cuenta con asientos con ajustes más pronunciados a la altura de los hombros y la zona lumbar, con costuras rojas de contraste. Este mismo color se emplea para resaltar detalles del volante y del salpicadero, lo mismo ocurre con los pedales que presentan un aspecto metalizado, creando así una ambientación acorde a su imagen exterior.
La estética escogida para su lanzamiento presenta un acabado bitono con la carrocería en color Serenity White Pearl, y la carcasa de los retrovisores y el techo en negro (Abyss Black Pearl). La idea es iniciar su comercialización esta primavera, y en un giro de guion final extender a todas las versiones del nuevo Kona, es decir a la híbrida y con motor de combustión, el mismo carácter con diseño distintivo N Line.