El impacto que la crisis económica derivada de la pandemia de la COVID-19 ha tenido en el sector de la automoción ha sido total. Faconauto Canarias, su patronal, ha aportado algo más de luz a las consecuencias que ha tenido en términos de facturación y puestos de trabajo mediante un detallado informe que establece que los concesionarios perdieron un 17,9% de su negocio.
Así, el ejercicio 2020 se cerró con una facturación del 1.513 millones de euros, frente a los 1.842 del año anterior. La venta de vehículos nuevos fue la que más sufrió los efectos de la crisis, cayendo un 18,5% su facturación hasta los 1.027 millones de euros, aunque fue el área de postventa la que experimentó una caída más acusada con un 19,7%. El canal de vehículos de ocasión, por su parte, se desplomó un 14,6% con una facturación de 315 millones de euros.
Manuel Sánchez es el presidente de la patronal regional fundada en 2019: “Este ha sido el peor año de la historia para el sector. No sólo por el desplome tan brutal de las ventas, un 50%, sino por el lastre que ha supuesto cerrar la actividad en seco durante casi tres meses”. A estos datos hay que sumarle un arranque de año desastroso que ha dejado al sector aún más preocupado. “Las perspectivas no son nada buenas, teniendo en cuenta como hemos cerrado el pasado mes de enero, de nuevo con una estrepitosa caída del 57%. Y a esto hay que añadir la actualización del impuesto de matriculaciones en este año, lo que supone un escollo más hacia la recuperación de las empresas canarias”.
En términos relativos, la caída del sector en Canarias está ligeramente por debajo de la que sufrió éste a nivel nacional. La distribución oficial cerró el pasado ejercicio con una facturación del 35.895 millones de euros, mientras que en 2019 lo hizo con 44.207, es decir, un 19% menos.
Volviendo a Canarias, este desplome del volumen de negocio tuvo como consecuencia directa la destrucción de 858 puestos de trabajo, según este balance realizado por Faconauto. Esta asociación advierte que aunque el mecanismo de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE) han amortiguado esa pérdida de empleos, seguirá el goteo si el mercado no da señales de recuperación. En este sentido, la patronal afirma que una encuesta encargada a MSI estima que el 64% de los concesionarios prevé reducir sus plantillas a lo largo de este año.
Sánchez insta a las autoridades a tomar medidas con urgencia. “No podemos, ni como sector, ni como región, seguir dejando pasar el tiempo. La patronal canaria está comprometida con los Objetivos de Desarrollo Sostenible y en particular, apostamos por una movilidad sostenible. Estamos trabajando mano a mano con el Gobierno de Canarias para poner en marcha un plan renove que nos ayude a renovar el parque automovilístico de las islas”. Faconauto Canarias estima que no será hasta 2022 cuando se produzca una recuperación económica que permita volver a los volúmenes de matriculación prepandemia.
Su matriz, Faconauto, ha coordinado la presentación de dos Manifestaciones de Interés (MDIs) a las convocatorias del Ministerio de Industria y de Transición Ecológica para que el sector tenga la oportunidad de acceder a los fondos europeos de recuperación (Next Generation EU). Bajo los títulos “El concesionario del futuro en un ecosistema de movilidad sostenible y conectada” y “Movilidad eléctrica: infraestructura de recarga, innovación y electrificación del parque móvil”, la propuesta quiere movilizar casi 500 millones de euros en los próximos tres años para impulsar al sector tras la pandemia.
