Desde que Sergio Vallejo venció en Ferrol, Miguel Fuster sabía que cada uno de los rallies que quedaban iba a ser una final. Ganó en Asturias y si quiere apretar la clasificación antes de Santander y Madrid sabe que va a tener que jugársela otra vez en Llanes. Pero dos de los factores que pueden echarle un cabo, climatología y recorrido, parecen no estar tan de su lado como cabría esperar.
Estrategia o no, Fuster ha dicho que algunos de los tramos en los que había puesto toda su fe para poder poner en apuros al GT de Vallejo no son tan propicios para el R5 como los recordaba. “Estamos volviendo a tomar notas. El rally tiene tramos conocidos pero el año pasado lo corrí con Dani Cué y este año con Nacho Aviñó y las notas cambian. De momento hemos visto que el ‘Siejo-Puertas’ que antes era ideal para nuestro coche, se ha transformado en una autopista y puede tener trascendencia en el resultado”.
Quizá el alicantino, que está a 40,5 del gallego en la provisional, esté buscando trasladar la presión a su rival colgándole la etiqueta de favorito. Sin embargo donde no hay trampa ni cartón está en la climatología porque las previsiones de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) señalan que no lloverá ni el día anterior ni tampoco la jornada del rally. “Con lo raro que es un Llanes sin lluvia este año parece que no va a haber agua. Justo cuando llevamos un coche con el que nos puede dar una ventaja. Cosas de los rallies...”, se lamenta el de Auto-Laca y ENE Watch.
