Después de una racha de siete rallys sin ‘rascar bola’ –la última victoria de un Ford fue del privado Mads Østberg en Portugal–, Malcolm Wilson parece haber puesto firmes a sus pupilos y en la primera etapa del Rally Gales Gran Bretaña tanto Jari-Matti Latvala como Petter Solberg han salido como auténticos toros.
Los Fiesta RS WRC oficiales se hicieron con los seis scratch de esta primera jornada y aunque fue Solberg quien tocó primero el liderato, cuando Latvala le dio el relevo lo hizo con autoridad. Sus 12,1’’ de ventaja le permiten comandar por primera vez un rally al final de la primera etapa desde el Rally de Portugal. Entonces acabó saliéndose en un tramo cuando la lluvia convirtió la carrera lusa en un auténtico caos. En su mano está limpiar por fin su expediente.
“He estado atacando”, dijo Latvala a WRC.com. El finlandés se quedó pálido cuando en el segundo tramo se salió ligeramente y golpeó una llanta que ocasionó una preocupante vibración en la dirección que su equipo solventó en asistencias. Está claro que para batir a Loeb y los Citroën, los demás tienen que ir absolutamente al límite. “El objetivo era hacer diferencias con los Citroën y estoy satisfecho de nuestro rendimiento. Los dos primeros tramos no fueron mis mejores actuaciones pero luego encontré el ritmo correcto. Estoy muy contento del coche, me está gustando mucho pilotarlo. No tenía esas sensaciones desde hacía mucho tiempo”, explicó al terminar la etapa.
Petter Solberg, fue el más rápido en los dos primeros tramos. El noruego, que ha ganado en Gales en cuatro ocasiones, era segundo clasificado por delante del ocho veces Campeón del Mundo, Sebastien Loeb, que terminó el día a 9.2 segundos de Solberg tras reconocer que no podía igualar el ritmo demostrado por los Ford. “He atacado en todos los sitios pero no ha habido oportunidad de recuperar tiempo a los Ford”, comentó Loeb. “No estoy preocupado porque no necesito ganar”, declaró el francés, que sabe que el título de pilotos y marcas están al caer y por ello prefirió no arriesgar y durante el bucle de la tarde llevó dos neumáticos de repuesto en su coche.
Mads Ostberg era cuarto con su Fiesta privado a pesar de que perdió unos cuantos segundos en la segunda especial cuando pensó que había pinchado y de quejarse de sus notas en el tercero. Mikko Hirvonen acabó quinto en un inicio sorprendentemente discreto de Rally de Gales para él y por delante de un Ott Tänak que fue arrastrando problemas en la dirección asistida de su Ford Fiesta de M-Sport.
El ruso Evgeny Novikov acabó por delante de Thierry Neuville, que fue el encargado de abrir pista en esta primera etapa y de Mathew Wilson, noveno en su regreso al mundial desde el Rally de Montecarlo. Chris Atkinson ocupaba la undécima posición de la general con su Mini John Cooper Works WRC por delante de Sebastien Ogier, duodécimo con su Skoda Fabia S2000. Nasser Al-Attiyah era decimotercero seguido de líder del SWRC Craig Breen.
La jornada del sábado arrancará a las 9:02 hora canaria y disputará dos bucles de tres tramos cronometrados cada uno además de la superespecial final de Celtic Manor. Los 14 mejores equipos saldrán a las pistas en orden inverso, siendo Paulo Nobre el primero y Jan Habig el segundo en las especiales galesas.