Su regreso a la monomarca de Citroën -catalogada ahora como Mundial Júnior-, en la que se proclamó subcampeón hace dos años, le está sentando de maravilla a Quentin Gilbert, que figura ya como líder en solitario del certamen, después de haber hilvanado dos victorias consecutivas en el primer tercio del calendario.
El joven francés dominó con suma comodidad en las pistas de tierra del norte de Portugal. Si bien a principio de rallye anduvo echando carreras con Terry Folb, el abandono de su compatriota en la primera especial del sábado le dejó el camino libre para destacarse al frente de la general, con una cómoda ventaja que supo administrar hasta el último tramo.
Otro joven francés, Pierre-Louis Loubet -hijo de Yves Loubet, Campeón de Europa de Rallyes en 1989-, cuajó una sorprendente actuación en su debut en el Campeonato del Mundo. Con tan solo 19 años, el muchacho, que apenas había disputado un par de rallyes antes de salir en Portugal, fue capaz de encaramarse al segundo peldaño del podio de su categoría. Un buen indicio, sin duda, en el debut mundialista de esta nueva promesa.
Por su parte, el finlandés Henri Haapamäki concluyó su primera actuación en Portugal como tercer clasificado de la general, por delante de Jean-René Perry y Ole Christian Veiby, a la postre quinto del rallye, a pesar de un volquetón que le obligó a abandonar en la segunda etapa.