La tecnología no puede estar reñida con el estilo, o eso debió pensar el equipo de diseño de Beeline a la hora de desarrollar su nuevo navegador para Triumph. Destinado a los propietarios de la Bonneville Modern Classic y con el objeto de equipar la moto sin romper la original estética de la que tanto presume, el nuevo dispositivo, algo mayor que la primera versión, se alinea perfectamente con el diseño de la motocicleta ofreciendo además importantes ventajas en términos legibilidad y uso.
Y es que junto a la disponibilidad de mapas de todo el mundo, cuenta además con función de ‘mini-mapa’ que indica con símbolos las instrucciones de navegación clave y ayudas extras a la hora de planificar una ruta, permitiendo personalizarla según las preferencias del usuario. A su vez, la nueva funcionalidad para importar y exportar archivos GPX permite compartir rutas de diferentes fuentes en cuestión de segundos.
La carcasa del dispositivo presenta una construcción robusta y a prueba de agua y golpes. Beeline ofrece ahora más opciones de montaje y accesorios por lo que es fácilmente adaptable a cualquier moto. La instalación se realiza mediante una aplicación gratuita. Tan solo hay que emparejar el dispositivo, elegir un destino y tocar en "Ir”. La duración de la batería de 14 horas y el cable de carga USB-C mejoran las funcionalidades del dispositivo. También viene con la aplicación y actualizaciones de software gratuitas de por vida, y con una garantía de 3 años.
Disponible desde ya en los concesionarios oficiales Triumph, su precio es de 235 euros, con un pack que incluye soporte universal y el cable de carga.
