Miguel Ángel Domínguez no se da por vencido. Aunque las noticias, sucesivas prórrogas del estado de alarma y los rumores sobre los plazos que se manejarán para que puedan celebrarse eventos multitudinarios, el presidente de la Federación de Automovilismo de Las Palmas (FALP) insiste en que su objetivo y el de su junta directiva es poder salvar los campeonatos de 2020.
“Todavía no tenemos fecha de inicio de la vuelta a la normalidad, pero cuando esto ocurra y desde el mismo momento en que las autoridades nos lo permitan, queremos estar preparados al máximo para poner en marcha el automovilismo en Lanzarote, Fuerteventura y Gran Canaria”, apunta Domínguez en una nota de prensa suministrada por el departamento de prensa de la FALP.
Achicándose cada semana que pasa la ventana del calendario en que se van a poder celebrar pruebas, el responsable de la federación provincial no pierde la esperanza. “No vamos a tirar la toalla antes de tiempo. Queremos retomar la temporada desde que se pueda, aunque sea durante los últimos cuatro o tres meses del año”. En este sentido, apunta que están analizando con organizadores y distintas comisiones de la FALP mediante reuniones por videoconferencia posibilidades como “alargar el curso hasta enero” o “fusionar varias pruebas en una”. Todo ello, explica, “unidos” y “poniendo todos de nuestra parte para sacar este deporte adelante”.
Asume el presidente de la FALP que “no se podrán organizar todas las competiciones” y recuerda que algunas, como la Subida de Tejeda o el Rallysprint de Artenara, han sido cancelados por sus propios organizadores. “Estamos mentalizados de que todo será mucho más complicado, pero tenemos que pensar en este deporte; en su capacidad para recuperarse; en los planes deportivos que ya estaban en marcha antes del estado de alarma por la pandemia del coronavirus, por las inversiones realizadas por varios equipos, patrocinadores y organizadores. Sin olvidarnos de un factor muy importante: el poder revitalizante que tiene cada subida y cada rally cuando llega a un municipio, pueblo o ciudad, aportando una dinámica económica y social positiva, que será tan necesaria para el futuro inmediato cuando se vuelva a la normalidad”, añade.
Confirma en esta nota Domínguez que en otras federaciones y gestores automovilísticos existe el criterio de dejar 2020 en blanco. A diferencia de ellos, Domínguez considera que “no se puede dar por perdida la temporada” y que hay que mantener la ilusión entre el colectivo de pilotos, copilotos, oficiales y aficionados”.
