En Francia tampoco ha podido ser. Yeray Lemes y Rogelio Peñate se han vuelto a quedar por el camino en la quinta cita del Campeonato del Mundo de Rallys Junior que se está celebrando este fin de semana en las carreteras de Alsacia, Francia. El equipo canario sabía que cualquier error en la primera jornada sería difícil de recuperar porque con una sola asistencia en condiciones al final de la etapa un golpe o una avería se iba a traducir en muchos minutos o en el abandono. Lo tenían claro, pero espoleados por los buenos tiempos intermedios del TC1 –llegaron a ser los más rápidos de los junior hasta que un semitrompo les retrasó a la quinta plaza a siete segundos del scratch- en el segundo salieron con la sana intención de mejorar algún puesto en la provisional.
Y en esas estaban cuando Lemes se salió de lo negro lo suficiente como para volver a dañar el puente trasero del Renault Clio Súper 1.600. En Alemania Yeray y Rogelio hicieron la machada de llegar al final de la primera etapa en
condiciones similares, pero esta vez los daños colaterales –destrozo de los neumáticos- hicieron imposible seguir adelante más allá de la tercera especial de este Rally de Francia. Quedaban dos tramos más, casi cincuenta kilómetros, y era imposible llegar a una asistencia de la que muy posiblemente habrían salido con el tren trasero en las mismas condiciones.
"La salida fue en un punto algo crítico, y mecánicamente podíamos haber seguido –explica el todavía campeón en título del nacional de tierra-. Pero el dañar los neumáticos con los que contábamos a bordo nos ha llevado al abandono. Aún con los problemas habíamos avanzado una plaza, pero hubiera resultado difícil igualmente ya que sólo existía hoy una asistencia remonta con pocas posibilidades de solucionar totalmente el problema. No era lo que esperábamos, pero ahora debemos marcarnos la meta de realizar dos buenas etapas". Con lo que Yeray no contaba es con una avería de motor que GMA Racing detectó cuando el Renault Clio Súper 1.600 llegó al service park. Según explica la nota del equipo, un problema "irreversible" en el motor que tenía un final cantado y que hizo que los canarios ni siquiera pudieran reengancharse al rally en la etapa de hoy sábado.
Entre lo positivo, si es que se puede extraer alguna lectura optimista de Francia, es que Lemes y Peñate siguen dejando algunas perlitas dignas de mención. En esta ocasión y una vez disputado el primer tramo de tan solo 9,9 kilómetros, conseguía el mejor tiempo intermedio aunque al final terminaban a siete segundos del primer clasificado, Mathieu Arzeno (Citroën C2 S1600) colocándose en la quinta posición provisional. Ya en la pasada prueba de Alemania fueron capaces de lograr tres scratch en la categoría JWRC y en el ánimo de la pareja isleña estaría el seguir engrosando la lista.
Ahora sólo queda esperar a la última cita, el Rally de España-Cataluña, una carrera que Lemes ya conoce de su debut mundialista en 2006, cuando corrió con un Citroën C2 Súper 1.600 de Auto-Laca. La última oportunidad para demostrar que hay un piloto canario de 23 años que merece un asiento en el mundial.
