Nissan ya ofrece en toda la gama de motorizaciones del Quashqai la tecnología de conducción semi-autónoma.
En concreto, se trata de su inclusión como equipamiento de primer nivel asociado a los modelos dotados con el nuevo motor de gasolina de 1,3 litros como ya ocurrió el año pasado tras la llegada del propulsor diésel 1.6 dCi.
El objetivo es que todos los clientes puedan beneficiarse de las ventajas de esta tecnología independientemente de la elección del propulsor escogido.
Este avance que acompaña a otros modelos como el Nissan Leaf eléctrico y el SUV de hasta siete plazas X-Trail, refuerza la confianza del conductor asistiéndolo en el guiado de la dirección, la aceleración y la frenada en situaciones de retención o alta velocidad en autopista.
Su funcionamiento está basado en un radar y varias cámaras. Su actuación conjunta permite ajustar la velocidad respecto al tráfico precedente y mantiene el coche en el centro del carril.
El nuevo motor gasolina de 1,3 litros ofrece un menor consumo de combustible y menos emisiones de CO2. Existen tres versiones del mismo: una versión manual de seis velocidades y 140 CV, una también manual de seis velocidades y 160 CV, y una versión con cambio DCT de siete velocidades y 160 CV. El par generado es de 240 Nm para la versión de menor potencia, de 260 Nm para la versión manual de mayor potencia y de 270 Nm para la versión con cambio DCT. Todas cuentan con tracción delantera y cumplen el nuevo estándar de emisiones Euro 6d-Temp.
