Tras tres temporadas disputándose con el DS3 R3-Max de Citroën Racing, el FIA Junior World Rally Championship, el Mundial de Rallies Junior, vuelve a disputarse a partir de este próximo año con los Ford Fiesta R2 de M-Sport. A diferencia de la anterior etapa (desde 2011 hasta 2013), será con los R2T, es decir, los que emplean el motor 1.0 EcoBoost turbo.
En realidad, M-Sport va a dar continuidad a un programa que no ha dejado de tener continuidad desde 2011. En 2014 se reconvirtió en el Drive DMack Fiesta Trophy en el que compitió Yeray Lemes y ahora, en asociación con el fabricante de neumáticos, vuelve a tomar las riendas del JWRC. Esta edición contará con seis pruebas: Córcega, Iralia, Polonia, Finlandia, Alemania y España.
Los diez primeros clasificados puntuarán y los equipos obtendrán un punto extra por cada scratch marcado. DMack mantiene como premio para el equipo campeón el participar una temporada en WRC2 con un Ford Fiesta R5 de M-Sport. Sin embargo, va a haber nuevos premios. El que logre una mayor renta de puntos en el global del Tour de Corse y Cerdeña se asegurará dos; lo mismo para el mejor del conjunto de los rallies de Polonia y Finlandia (los más rápidos de la temporada) y el Rally de Alemania y el de España. El séptimo premio estará dirigido al equipo campeón.
La construcción y el mantenimiento de todos estos coches ser realizará en la filial que M-Sport tiene en Cracovia (Polonia). El Junior WRC está abierto hasta el 3 de febrero de 2017 a pilotos nacidos después del 1 de enero de 1988 y la inscripción, de 150.000 libras, incluye neumáticos, gasolina, asistencia y el alquiler del Ford Fiesta R2T.
Nombres como Stéphane Lefebvre, Craig Breen, Sébastien Ogier, Dani Sordo, Dani Solà y Sébastien Loeb han sido campeones del JWRC. Simone Tempestini se hizo con el título el pasado año.