Con un toque de nostalgia

De un tiempo se han popularización las motocicletas de inspiración retro, un estímulo para muchos nostálgicos al tiempo que un semillero para jóvenes que buscan una forma distinta de expresión de su propia individualidad. Este amplio reconocimiento y aceptación ha llevado a cada vez más fabricantes a desempolvar  sus viejos archivos buscando cualquier vestigio de su herencia con el objetivo de alimentar esta nueva corriente.

Yamaha da rienda suelta a toda ese bagaje y capacidad creativa a través del concepto Faster Sons, una combinación de diseño atemporal  y estilo vintage edulcorado con los últimos avances en el ámbito del confort y la seguridad. El último ejemplo es la XSR700 XTribute, exhibida durante la última edición del Salón Internacional de Milán que se prevé llegue a las exposiciones al término del primer trimestre del próximo año.

El modelo rinde homenaje a la XT 500, todo un icono de los años 70 y 80, protagonista también de los primeros ‘Dakar’ equipada para tal ocasión con un tanque de mayor capacidad y todo el talento artesanal que atesoraban aquellos locos aventureros para superar la dureza de la emblemática carrera africana. Ahora este ‘tributo’ se pone de manifiesto a través del grafismo utilizado en el logotipo ‘XSR700’ y la decoración, con el depósito en plateado, los guardabarros en blanco y las llantas doradas. La firma ha denominado a este acabado ‘1981’ en referencia a la época dorada de la XT.

Este enfoque desemboca en una motocicleta que se decanta por una arquitectura tipo Scrambler, con el manillar alto y ancho que anima a una conducción más erguida y facilita las maniobras en ambientes urbanos y un asiento recto, muy cómodo para dos pasajeros. El motor en negro, los protectores del bastidor, las estriberas dentadas o la simulación de los fuelles de goma en la horquilla siguen un patrón tipo off road. Una directriz a la que también se suman los neumáticos mixtos (180/55-17 delante y 120/70- 17 detrás) montados sobre llantas ligeras de fundición de 10 radios. Al final es sólo puro “postureo”, sin duda su zona de influencia está sobre el asfalto, el lugar ideal para presumir de la pureza de su estética minimalista.

Camuflados bajo su aspecto, la experiencia se enriquece con detalles como la luz LED trasera y el panel de instrumentos LCD. Clásica y moderna a la vez, la XSR700 XTribute expone la particular belleza de un modelo capaz de extraer la esencia de ambos mundos.

Digna de su generación

El comportamiento de esta moto de estilo tan original descansa sobre el propulsor de dos cilindros en línea de 689 cc y 75 CV de potencia, el mismo que utiliza nada más y nada menos que la MT-07. Ello unido a su reducido peso en orden marcha -186 kilos-, el bastidor de acero y el chasis compacto la convierten en una moto ágil y divertida a la vez que contundente cuando tiene que revelarse.

Aún así y dada esa bis romántica de su desarrollo, la actuación del motor, como ocurre en la XSR700 original, se decanta por un desempeño más lineal frente a la explosividad, estirando la entrega de potencia para revelarse más viva en la zona media y alta del cuentarrevoluciones. Eso sí, siempre hay recursos para sacar a la luz su carácter, en esta ocasión mediante la disponibilidad del escape opcional Akrapovič concebido ex profeso para este modelo cuyo diseño no hace más que alimentar el ego de su arquitectura.

A tu manera

La línea de accesorios originales contempla la posibilidad de cubrir aspectos relevantes de la motocicleta como los funcionales -pantallas y maletas- o de protección, en su caso destinados a resguardar los elementos principales de su estructura. Además existe toda una colección de complementos y ropa técnica de inspiración clásica, desde atractivas prendas como camisetas y chaquetas de cuero hasta cascos de diseño abierto para llevar esa comunión entre usuario y motocicleta a su máxima expresión.