Ducati ha hecho un verdadero ejercicio de compromiso presentando un modelo aún más afinado con modificaciones en su estructura, electrónica y revisado en términos de comportamiento.
En el serial dedicado este año a revelar las novedades para la próxima temporada, Ducati ha otorgado a la Multistrada V4 un nuevo papel protagonista con el lanzamiento de la versión Pikes Peak. Este modelo se ha mostrado tradicionalmente como el más radical de todas sus ediciones y en esta ocasión no iba a ser menos en su estreno con configuración con motor V4 Granturismo. La nueva Pikes Peak se ha desarrollado incorporando cambios que se manifiestan en la geometría del bastidor, la electrónica e introduciendo diversos componentes distintivos para convertirse en el modelo exclusivo y extremo que siempre ha sido.
Con una decoración inspirada en los colores y gráficos de la Desmosedici GP21, para subrayar aún más su faceta deportiva algunos componentes están acabados en fibra de carbono y luce un impresionante escape Akrapovič de titanio y carbono. No es lo único que destaca. La pantalla corta ahumada y la horquilla delantera Öhlins en dorado anodizado junto al asiento trasero bicolor y la insignia Ducati Corse en el pico le confieren, sumado a todo lo demás, su imagen característica.
Pero los cambios en la Multristrada V4 Pikes Peak no se limitan simplemente a una cuestión estética. Respecto a la Multistrada V4 convencional también se han realizado modificaciones en su geometría, con una mayor inclinación de la pipa de dirección y de su avance lo que ha aumentado ligeramente la distancia entre ejes. También se utiliza una llanta delantera de 17 pulgadas para ganar en precisión y capacidad de respuesta según los responsables de la marca. Del mismo modo, los neumáticos deportivos de asfalto y las llantas en aluminio forjado Marchesini hacen que el modelo sea más ligero. Las suspensiones Öhlins Smart EC 2.0 y los frenos, el delantero idéntico al de la Multistrada V4 S a la que se añaden las pastillas de la Panigale V4, son la guinda para garantizar una respuesta acorde a su carácter.
Ducati también ha revisado la ergonomía para mejorar la posición del piloto sobre la moto. Así, las estriberas están ubicadas más altas y se han desplazado ligeramente hacia atrás al tiempo que se ha optado por un manillar más bajo y más estrecho.
A nivel mecánico no hay cambios sustanciales, sí a nivel de respuesta. El motor de 1.160 cc, V4 Granturismo, conserva sus 170 CV de potencia, con un par máximo que asciende a 125 Nm. La mayor novedad estriba en la introducción del nuevo perfil de conducción ‘Race’. Esta opción permite optimizar la gestión del limitador, interviniendo de forma más gradual para un pilotaje más efectivo en cuanto a cambios de marchas dentro de la zona alta del cuentavueltas. El cambio rápido también tiene una estrategia dedicada que permite reducciones de marcha extremadamente agresivas, así como la implementación de una respuesta de aceleración aún más directa en el modo de alta potencia.
Del mismo modo se mantiene el paquete electrónico original, eso sí, con la tecnología de radar de serie tanto en la parte delantera como trasera que ofrece Control de Velocidad Adaptativo (ACC) y detección de puntos ciegos (BSD). También se ha actualizado el Sistema anti-Wheelie y el ABS Cornering.