Parece que se han terminado las medias tintas y Volkswagen decide enfocar buena parte de sus esfuerzos a ganar terreno como marca de referencia en movilidad sostenible. Como nuevo hito estratégico el fabricante ale
mán ha decido llevar a la producción en serie el modelo híbrido enchufable XL-1 que con un consumo de 0,9 l/100 km está considerado el vehículo más eficiente del mundo.
En más de 10 años de evolución, el XL-1 ha conseguido finalmente el visto bueno de los representantes de la marca para alcanzar el estatus de vehículo de producción “plenamente utilizable y apto para el uso diario”. A diferencia de los dos prototipos que le precedieron (2002 y 2009), este ofrece dos plazas paralelas ligeramente desplazadas como un coche convencional. En su construcción se ha tomado como referencia las bases sobre las que se sustenta un deportivo, es decir, reducción del peso (795 kg) mediante la utilización de fibra de carbono en el monocasco y las piezas adosadas exteriores, bajo centro de gravedad y un coeficiente aerodinámico excelente de 0,189. En concreto el nuevo XL-1 tiene una longitud de 3.888 mm, una anchura de 1.665 mm y una altura de sólo 1.153 mm.
El conjunto propulsor está compuesto por un motor TDI bicilídrico del 48 CV y un motor eléctrico de 27 CV asociados a un cambio automático de 7 velocidades de doble embrague DSG y una batería de iones de litio. Con ello se consigue unas emisiones de tan sólo 21 g/km CO2 además de una autonomía de hasta 50 kilómetros en modo puramente eléctrico. En caso necesario, el XL-1 ofrece un tiempo de aceleración de 12,7 segundos de 0 a 100 km/h y puede alcanzar una velocidad máxima de 160 km/h.
