La firma de Stuttgart ha aprovechado el acto de conmemoración de su 70 aniversario para desvelar el nombre de su primer vehículo de producción en serie completamente eléctrico.
Con denominación de origen oriental, Taycan se puede traducir según explican sus responsables como “caballo joven enérgico”. Este hace referencia al corcel que luce Porsche en el centro del escudo de la compañía. El inicio de su producción está fechado en 2019.
Heredero directo del prototipo Mission E, Porsche es de las marcas deportivas por excelencia la que más visible ha hecho su apuesta por la electromovilidad. De hecho, la inversión prevista hasta el año 2022 asciende a 6.000 millones de euros destinados a avanzar en este campo. De estos, 500 irán destinados al desarrollo de variantes y derivados del Taycan, en torno a mil millones para electrificación e hibridación de la gama existente, 700 millones en nuevas tecnologías, infraestructura de carga y movilidad inteligente y el resto para la expansión de los centros de producción.
El nuevo deportivo eléctrico, movido por dos motores síncronos de funcionamiento continuo (PSM) con una potencia superior a los 600 caballos (440 kW), acelera de 0 a 100 km/h en menos de 3,5 segundos y alcanza los 200 km/h antes de los doce segundos. Este rendimiento se suma a un nivel de potencia continuo que no tiene precedentes entre los automóviles eléctricos: se pueden hacer varias arrancadas consecutivas sin perder rendimiento y, además, su autonomía máxima supera los 500 kilómetros en el ciclo de homologación NEDC.