Julio Martínez y Dani Sosa ha empezado con buen pie su andadura con el Suzuki Swift Sport con el que este año van a participar en la copa monomarca que se desarrolla en el seno del Campeonato de España de Rallies de Asfalto. Los grancanarios han cumplido en el XIV Rally de Guriezo, llevando su coche a meta y, además, trazando una curva de aprendizaje ascendente.
Venían a Cantabria con la única intención y la única obligación de acumular experiencia, y es lo que hicieron. En su segunda participación en rallies tras el Rally Villa de Santa Brígida –que se saldó con abandono tras una leve salida de carretera–, Martínez necesitaba tomarle la media al Swift y, además, en un escenario complejo como el de los tramos de esta zona de Península.
Un reto que se agrandó por una climatología cambiante y que hizo de este rally un verdadero curso intensivo de cara a la Copa Suzuki Swift. Con un planteamiento de reconocimientos similar al que deberán seguir en el CERA, lo más destacable de su papel en Guriezo es que siguieron una línea de crecimiento, algo que quedó patente en el segundo paso por el tramo de ‘Ampuero-Guriezo’ de más de 12 kilómetros. Con lluvia, niebla, en descenso y además ya en pleno ocaso –condiciones nuevas en un rally para Julio–, sorprendieron al hacerse con un crono mejor que el de muchos Swift inscritos en este rally.
“Nuestra valoración es positiva, sobre todo si tenemos en cuenta que había que rodar y acabar la prueba”, recuerda el piloto de Fedeauto. “El coche nos ha parecido fácil de pilotar, ahora lo conocemos un poco más para poder trabajar en algunos de los pocos detalles que se puede y en nuestra adaptación a sus frenos. En el Rallye de Guriezo fuimos mejorando siempre nuestros tiempos y creo que la adaptación a las difíciles condiciones meteorológicas también fue muy bien. Rodamos rápido, pero seguros, además de sumar experiencia con nuestras notas en un terreno tan exigente”.
