El shakedown del Tour de Corse ha tenido una doble funcionalidad a los ojos de Kris Meeke. Por un lado, le ha servido para corroborar, al igual que el pasado año (hasta que se rompió el motor), inclusive, en el Cataluña, que el Citroën C3 WRC es un misil sobre asfalto; por otro, le ha valido al británico para constatar que Sébastien Loeb no es el único piloto de la marca francesa con cuantiosas posibilidades de darle el triunfo a su equipo en el rallye de casa.
El pelirrojo del Ulster ha salido con ganas al tramo de pruebas (5.45 kilómetros) y, en la primera pasada, antes de que la pista comenzara a ensuciarse por el barro que sacaban los coches de las cunetas al cortar, ha establecido un crono demoledor que nadie, ni siquiera él mismo, ha logrado igualar.
Los Hyundai de Andreas Mikkelsen, Thierry Neuville y Dani Sordo se han clasificado a continuación, por ese orden, a más de dos segundos del británico. Sébastien Ogier y Elfyn Evans han entrado tras ellos, seguidos por Sébastien Loeb, que se ha dejado cerca de un segundo por kilómetro en su primera tentativa sobre asfalto seco a los mandos de un WRC actual.
Ott Tänak ha sido el mejor clasificado entre los representantes del equipo Toyota, que, desde luego, no han dado síntomas demasiado positivos en los primeros kilómetros del fin de semana. Entre ellos se ha intercalado Stéphane Lefebvre, que ha dejado patidifusos a todos los participantes y jefes de equipo de la categoría WRC2, reventando el cronómetro en el primer enfrentamiento contra el reloj de su nuevo y flamante Citroën C3 R5.
El galo se ha clasificado octavo en el shakedown, delante de Jari-Matti Latvala y Esapekka Lappi, estableciendo un registro demoledor que ha corroborado también su compañero de marca para este rallye, el vigente campeón francés, Yoann Bonato; segundo entre los participantes de la clase R5, por delante del WRC de Bryan Bouffier, a 1.2 segundos de su compatriota.
Los dos Citroën han eclipsado a todos sus adversarios, endosándoles prácticamente dos segundos por kilómetro (se dice pronto...) a los hombres que están llamados a disputarles el triunfo. Nicolas Ciamin se ha posicionado tercero con su nuevo Hyundai, seguido de Jan Kopecky, Ole Christian Veiby y Pierre-Louis Loubet. Nil Solans se ha clasificado dos puestos por detrás del joven galo, a pesar de haberse marcado una excursión con la hierba.
Entre los participantes del Mundial Júnior, los suecos Dennis Radström y Emil Bergkvist, dominadores indiscutibles de la primera cita del campeonato, disputada en su país, han dado la sorpresa postulándose también como hombres de referencia sobre asfalto, al encabezar la clasificación correspondiente al tramo de pruebas por delante del alemán Julius Tannert.
