Definitivamente, Sébastien Loeb no va a culminar por la puerta grande su despedida oficiosa de PSA... El Dakar se le ha dado hoy la vuelta por completo el penúltimo día de carrera, en el que la mecánica de su buggy ha vuelto a flaquear, acarreándole, en total, una hora y cuarto de demora, más que suficiente para que Nani Roma haya podido respirar tranquilo y apuntalar el segundo puesto al que se aupó ayer.
Aunque hasta el momento no haya ganado ninguna especial, este está siendo el mejor Dakar en la carrera del catalán desde que ganó por primera vez la categoría de coches, hace justamente un lustro. Antes de afrontar la especial que pondrá mañana punto y final a esta aventura, el piloto de X-Raid aventaja por más de una hora a Loeb, quien, a pesar del contratiempo de hoy, se mantiene en puestos de podio, a resultas del abandono (por una lesión de espalda de su copiloto, David Castera) que ha protagonizado hoy Stéphane Peterhansel.
Carlos Sainz también ha pasado los de Caín, en su caso, para salir del bivouac, donde los mecánicos de la escuadra Mini han intentado reparar durante horas, sin conseguirlo por completo, el sistema de dirección asistida que resultó dañado ayer, cuando el madrileño encayó por la mañana. Un percance que le ha obligado a comenzar la especial con seis horas de retraso, pese a lo cual, se ha marcado la machada de clasificarse sexto.
Quien se mantiene indemne completamente es el líder del rallye, Nasser Al-Attiyah, que ha ganado la etapa de hoy, incrementando a 55 minutos el margen del que dispone para festejar mañana su segunda victoria en el Dakar.