El Dakar 2012 enfila sus últimos kilómetros en suelo chileno y, con ello, empieza a verse en el horizonte la meta de Lima, en Perú. Los canarios Pedro Peñate y Jorge Gómez han dejado atrás dos nuevas etapas estabilizando su ritmo y ganando posiciones en la general.
Peñate respiró tranquilo cuando comprobó al principio de la novena etapa, la de Copiapó-Antofagasta –con un recorrido total de 722 km de los que 477 eran de sector selectivo- que el motor de su KTM EXC 450 refrigeraba algo mejor gracias a unas temperaturas algo más suaves a medida que la columna de vehículos avanza hacia el norte. A pesar de ello, el canario tuvo que tomar algunas precauciones que le llevaron a perder más tiempo, terminando en el puesto 80 de la etapa en la categoría de motos y ascendiendo al 103 de la general.
Pero para jornada dura, la de Antofagasta-Iquique. 606 kilómetros de especial cronometrada partida en dos con un tramo neutralizado. La más larga de esta edición del Dakar y de nuevo bordeando la orilla del Pacífico hasta llegar a la gran duna de Iquique, uno de los puntos más emblemáticos de la carrera desde que fue desterrada de África. Una jornada que concentraba buena parte de la esencia del raid con un primer sector que discurrió entre cañones, pistas abiertas y trampas de fesh-fesh y, el segundo tras la neutralización, con mayores dosis de navegación y arena hasta la caída en picado de tres kilómetros desde la duna de Cerro Dragón hasta el mar, con una pendiente media del 32 por ciento.
Pedro, que terminó en el puesto 74 en esta novena jornada, llegó al vivac encantado. “Es una etapa preciosa. Tiene de todo y cuando ya sabes lo que te espera al final, da igual el cansancio porque la gran duna de Iquique es bestial. Me impresionó en 2010 y lo ha vuelto a hacer. En días así uno vuelve a enamorarse de esta carrera”, afirmó el canario, que ya ocupa el puesto 94 de la general a pesar de la cantidad de horas perdidas en la primera semana. Ha sido un día redondo, ya que las suaves temperaturas volvieron a darle alas. “A partir del miércoles está previsto que vuelva a apretar el calor. Si es así, por precaución volveré a parar de vez en cuando porque a cinco días para la meta… Nadie se la juega. Estoy muy cómodo y disfrutando encima de la moto como ningún otro Dakar”, afirmó en el campamento de Iquique el piloto grancanario.
El reencuentro con Iquique
Su paisano Jorge Gómez tenía una cuenta pendiente con esa gran duna de Iquique. El pasado año, en la edición de su debut, una avería mecánica le obligó a bajarla con la moto a rastras, un tortuoso camino del que no tenía un gran recuerdo el piloto de Husqvarna. Ayer, en cambio, pudo llegar a lomos de su TE449 y logrando el puesto 86 de la etapa en su categoría después de casi ocho horas de etapa.
“Por fin he podido bajar las dunas de Iquique sobre la moto. El año pasado me tocó bajarlas a pie arrastrando la moto con un esfuerzo interminable”, recordó con alegría nada más terminar una etapa “muy larga, muy dura con mucho viento y dunas gigantescas”. Gómez se sorprendió de haberla superado “con más facilidad de lo que me imaginaba”, si bien una avería en el servo del road-book le obligó a moverlo a mano durante todo el día.
Hoy miércoles 11 de enero, última etapa en Chile antes de ingresar en el tercer país en liza en este Dakar 2012: Perú. Iquique-Arica será una especial de raid pura y dura con navegación, cantidades ingentes de arena y, por supuesto, fesh-fesh.
