Al margen de la superioridad del equipo que forman Luis Monzón, José Carlos Déniz y el MINI John Cooper Works WRC, los campeonatos son para quienes más regularidad consiguen a lo largo de la temporada, y está claro que en esto los canarios van a ganar por goleada. La primera etapa del 50 Rally Príncipe de Asturias ha sido un nuevo botón de muestra de la fortaleza de los líderes del Campeonato de España de Rallies de Asfalto y de la falta de fortuna de los que esta temporada debían ser sus principales rivales.
Miguel Fuster volvía al Porsche después de participar con un Suzuki Swift en Ferrol, pero no le dio tiempo ni de calentar las ruedas. Nada más arrancar en el primer tramo el GT del tetracampeón de España de rallies rompía un palier y tenía que abandonar después de sólo 50 metros. Xevi Pons se mantuvo en carrera hasta el cuarto tramo. Se batía con Sergio Vallejo por la segunda posición cerca de los dominios de Monzón, pero de nuevo otra avería en el Mitsubishi Lancer Evo X N Plus del ACSM Rally Team lo dejaba en la estacada. Lo suyo en el CERA parece una maldición esta temporada.
Esto dejó a Sergio Vallejo como única alternativa al dominio tranquilo de Monzón. El de MINI no estaba complicándose en exceso y sobre un asfalto muy resbaladizo fue adjudicándose un tramo tras otro con la salvedad del segundo, que hubo de ser anulado por el vuelco del Renault Clio R3 de José Luis Peláez y Diego Sanjuán. Pero entonces, en el quinto tramo, los problemas mecánicos se instalaron en el Mitsubishi Lancer Evo X N Plus ‘R4’ de Alberto Meira, el rival más cercano en puntos en la lucha por el título con Monzón. El gallego, que iba tercero, ya había sumado un cero en Ferrol y, unida a la baja de Fuster, volvía a dar la oportunidad el canario de multiplicar su ventaja al frente del CERA.
Al mismo tiempo que Meira se quedaba parado en el enlace hacia el sexto tramo, la lluvia, ese temido factor, aparecía con la mayoría de los participantes montando neumáticos de seco en sus coches. ‘Santana 2’, de 14,32 km se disputó con el asfalto húmedo y con Monzón ya en ‘modo campeonato’ fue Sergio Vallejo quien se hacía con el scratch rompiendo el monopolio del satauteño.
A la humedad se le unió la niebla en ese TC7 final, pero sólo pudieron disputarlo un puñado de pilotos del europeo. Jonathan Pérez y Javier Álvarez no podían tener un estreno más amargo con el Citroën DS3 R3T: accidente, conato de incendió y consiguiente abandono para un dúo, el del Sariego Rally Team, que no levanta cabeza este año. Este hecho obligó a neutralizar también esta última especial del día dejando las cosas en el CERA tal cual con Monzón primero y Vallejo a 10,5’’. Aún quedaba rally.
Los abandonos de Pons y Meira dejaron libre el tercer puesto para que lo tomaran los locales Óscar Palacio-Agustín Ramos con otro de los Porsche 997 GT3. También abandonaron a lo largo de esta etapa el Dacia Sandero de Alberto Monarri, igual que el Porsche de Fuster, por rotura de palier el día de su estreno; y Surhayen Pernía, esta vez por la transmisión de su Mitsubishi Lancer Evo X de RMC Motorsport.
Betti no dio la talla
Que la Copa de Europa de Rallies tiene poco que ver con el ERC lo demuestra la presencia casi anecdótica de los italianos Luca Betti-Francesco Pezzoli con un Ford Fiesta Súper 2000. Líderes del apartado continental a pesar de estar lejos de los equipos de cabeza del CERA, iban camino de terminar la etapa como quinto equipo más rápido en lo que sería una hipotética clasificación global, pero acabaron abandonando por culpa del motor.
Álex Pais y Santi Pais (Mitsubishi Lancer Evo X) empezaron echándole carreras a Betti hasta que el italiano tomó ventaja. Su abandono les sirvió en bandeja un primer puesto en la Copa de Europa de Rallies que vendría después del segundo puesto absoluto obtenido en Ferrol semanas atrás. Sin embargo al cierre de esta edición iba tomando cada vez más fuerza el rumor de que Betti había reclamado tanto a los gallegos como al asturiano Fran Cima por emplear neumáticos no válidos para la copa y algunas informaciones apuntaban incluso a la exclusión de uno y otro equipo de ese apartado continental, que no del Rally Príncipe de Asturias. Ampliaremos información en la crónica de mañana.
Al margen de ello, en el CERA, los hermanos Pais no podían con los oficiales de Suzuki Motor Ibérica Joan Vinyes-Jordi Mercader, cuartos, y Gorka Antxustegi-Alberto Iglesias, quintos. ‘Cohete’ Suárez y Cándido Carrera (Ford Fiesta R2) rompieron el rally dentro de la categoría R2 con un ritmo del mundial dejando atrás Alberto Otero-José Alberto Rodríguez (Renault Twingo R2), Jorge González-Santiago Vallejo (Renault Twingo) y el tinerfeño Marco Lorenzo con Rodolfo del Barrio de copiloto (Ford Fiesta R2). Los asturianos del ACSM Rally Team acabaron en una más que notable séptima posición provisional en el nacional.
Por copas, Adrián Díaz acabó líder de la Suzuki Swift, Jorge González ‘Rantur’ el Challenge Renault Twingo y Ángel Paniceres como único superviviente en la Evo Cup de Mitsubishi.